La ceremonia de entrega de la tercera edición de los Premios Españoles Ejemplares tuvo lugar el 23 de febrero de 2010, a las 20:00 horas, en la Real Casa de Correos (Sede de la Presidencia de la Comunidad de Madrid), ante un auditorio repleto de público.
• Editorial: Españoles ejemplares
• Vídeo y fotografías de la III Edición de los Premios «Españoles Ejemplares»
• Jurado y Premiados de la Tercera Edición de los Premios «Españoles Ejemplares»
• Intervención de Fernando García de Cortázar
En su discurso de apertura, Santiago Abascal, Presidente de la Fundación DENAES, señaló que la fundación «reconoce a quienes dan un paso al frente más allá de sus obligaciones profesionales en defensa de la nación española». Asimismo, resaltó que los premiados realizan «un compromiso valiente, costoso e incómodo, muy incómodo, en esta España que languidece, como un Gulliver en manos de liliputienses». No obstante, afirmó ver en los premiados un «motivo de esperanza, la vanguardia de la resistencia de una nación que se resiste a disolverse mansamente».
En la categoría de Virtud cívica el premiado fue la ciudad de Santander, por ser una de las primeras ciudades españolas en colocar un monumento en recuerdo y homenaje a todas las víctimas del terrorismo, y por la colocación de la enorme bandera en Puerto Chico, mostrando así su adhesión a la Nación Española. Recogió el premio de manos de Ricardo Garrudo, Vicepresidente de la Fundación DENAES, el Alcalde de la ciudad, Iñigo De la Serna, quien destacó «la identificación mayoritaria de los santanderinos con la nación española» y «su cercanía a las víctimas del terrorismo».
En la categoría de Deportes el elegido ha sido Carlos Sainz, uno de los profesionales con mejor palmarés de la historia del deporte español, que recientemente ha declarado «soy un patriota» y que siempre se ha mostrado orgulloso de traer sus numerosos títulos a España.
En la categoría de Periodismo, el galardón recayó en el diario de internet Libertad Digital, que destaca por su comprometida defensa de la lengua española y de las libertades individuales de los ciudadanos de la Nación Española, criticando consecuentemente los nacionalismos periféricos y los Estatutos de autonomía disgregadores en sus editoriales. Recogieron el premio los periodistas del diario César Vidal y Federico Jiménez Losantos de manos de José Antonio Ortega Lara, a quien Losantos elogió como «un español ejemplar y un ejemplo de español». César Vidal, por su parte, recordó que «los verdaderos españoles ejemplares, los anónimos, que no reciben premios son los que reclaman memoria, dignidad y justicia para las víctimas, los que se defienden del acoso de los nacionalistas y los que luchan por educar a sus hijos en castellano».
El premio en la categoría de Arte y Humanidades fue para el dialectólogo, lexicógrafo y crítico literario Gregorio Salvador Caja, en reconocimiento a su brillante carrera profesional y por su convicción de que la finalidad de la lengua no es crear identidades, sino comunicarse con el mayor número de personas posible. «La lengua no es de los territorios, es de las personas», señaló en su discurso, así como que el derecho a utilizarla «es del hombre, no de la tierra».
En la categoría de Actividad profesional, el arquitecto Antonio Lamela recibió su reconocimiento tanto por su obra profesional como por su libro del año 2008 Del idioma español y su futuro, trabajo que declaró haber afrontado «ante la inacción de las instituciones que deberían hacerlo». Lamela, que aboga por la preservación de una lengua que traspasa fronteras y que paradójicamente es atacada en España, afirmó sentirse «muy español, cada día más».
Tras la intervención de los premiados, Fernando García de Cortázar, Patrono de Honor de la Fundación DENAES, leyó su discurso. La clausura del acto correspondió al consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados. Posteriormente, el acto concluyó con la audición del Himno de España.
