‘FOMENTAR LA UNIDAD Y LA CONCORDIA’.
01-07-2006-El Mundo
MADRID.- El cardenal y arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco, ha enviado una carta a todos los sacerdotes de la archidiócesis en la que les solicita que en todas las celebraciones eucarísticas «se haga oración pública y se rece por España».
La carta, que firma el obispo auxiliar de Madrid, Fidel Herráez, y de cuyo contenido ha informado el gabinete de prensa del arzobispado, pide que se rece para que «las instituciones democráticas y todo el pueblo fomenten en España la verdad y la libertad, la justicia y la paz, la unidad y la concordia».
Se pide también a los fieles que se rece por «el pleno reconocimiento de los derechos fundamentales de todos».
En el texto de su misiva, Herráez explica que «la reciente Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española en su comunicado final, entre otras realidades, ha invitado a todas nuestras comunidades católicas a elevar oraciones al Señor pidiendo por España».
La carta agrega que el cardenal Rouco ha tomado esta decisión después de haber consultado a su Consejo Episcopal, y quiere que en la diócesis de Madrid «a partir de ahora y hasta nueva indicación» se incluya esta oración.
En la nota final de la reciente Asamblea Plenaria extraordinaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE), en su último párrafo, los obispos invitan a las comunidades cristianas vivir con intensidad y coherencia la vida cristiana, y a rezar por España.
La nota dice textualmente: «Invitamos a los católicos a vivir con intensidad y coherencia la vida cristiana. La ya próxima visita del Papa a Valencia con motivo del V Encuentro Mundial de las Familias, nos confirmará a todos en la fe y nos ayudará a seguir con esperanza firme el camino del amor cristiano».
«Al mismo tiempo, termina la declaración final del plenario de la CEE, invitamos también a las comunidades católicas a elevar oraciones al Señor para que, con la intercesión de la Virgen María, las instituciones democráticas puedan fomentar en España la verdad y la libertad, la justicia y la paz, la unidad y la concordia, en el pleno reconocimiento de los derechos fundamentales de todos».