Toman la iniciativa en el impulso de la reforma del marco autonómico asturiano.
14-09-2006-ABC
OVIEDO. Los grupos parlamentarios del PSOE e IU en la Junta General del Principado siguen adelante con los trámites para reforma del estatuto pese al bloqueo del PP, sin cuyos votos es imposible alcanzar los tres quintos del parlamento para hacer aprobar la nueva norma. Ayer de forma conjunta, llevaron al registro de la Junta General del Principado la solicitud de creación de una ponencia para la elaboración de un texto de propuesta para la reforma del Estatuto de Autonomía. Un gesto vacío ya que el presidente del PP, Ovidio Sánchez, se reafirmó de nuevo en su rechazo a abordar la reforma a seis meses de que se disuelva el parlamento autonómico para las elecciones de 2007.
Con este gesto, los dos grupos parlamentarios que apoyan al gobierno regional toman la iniciativa en el impulso de la reforma del marco autonómico asturiano, tal y como había pedido el presidente Vicente Álvarez Areces, al descartar que su ejecutivo fuese a dar ese paso.
«No es el momento»
No faltó quien viese ayer en este gesto «un burdo electoralismo», pero no fue el presidente del PP. Sánchez apuntó ayer que el PSOE «está en su derecho» de pedir una iniciativa parlamentaria para abrir la ponencia sobre la reforma estatutaria. Otra cosa es que tenga razón o sentido hacerlo: «La serenidad que precisa una reforma del Estatuto de Autonomía de Asturias debe de alejarse de procesos de una mayortensión», las elecciones autonómicas, advirtió. A su juicio, la proximidad de la cita electoral puede poner sobre la mesa algunos temas restando protagonismo a otros de interés. «En el punto final de la legislatura creemos que no es el momento para hacerlo y si tienen tanta prisa que la hubieran propuesto antes», argumentó.
A su juicio, el Gobierno regional la presentó en ese momento «con el ánimo de que no pasara por las Cortes Generales». En rueda de prensa, Sánchez realizó esta argumentación un día después del debate en la Junta general del Principado en el que rechazó acometer en esta legislatura la reforma del Estatuto. Aseguró que mantiene la misma reflexión de que «no es el tiempo para debatir esta reforma que en ningún caso se aprobaría en las Cortes Generales antes de las elecciones».