El juez Baltasar Garzón está tomando declaración a los diez detenidos el pasado martes en el País Vasco y Navarra, entre los que se encuentran Otegi y Usabiaga, acusados de intentar reconstruir la dirección de la formación proetarra.


 Otegi, custodiado por varios agentes | EFE

Otegi, custodiado por varios agentes | EFE

2009-10-16

EFE

A partir de las diez de la mañana el magistrado de la Audiencia Nacional comenzó a interrogar al ex portavoz de Batasuna-ETA Arnaldo Otegi, al histórico dirigente de la formación proetarra Rufi Etxebarria, al ex secretario general de LAB Rafa Díez Usabiaga y a la ex tesorera del PCTV-EHAK Sonia Jacinto.

Además de estos cuatro, pasarán ante el juez Arkaitz Rodríguez, que fue juzgado en 2006 por ser miembro de los aparatos de captación e información de ETA y que resultó absuelto; Miren Zabaleta, hija del coordinador general de Aralar y parlamentario navarro, Patxi Zabaleta; José Luis Moreno Sagües (Txelui), candidato al Legislativo foral en una lista que fue ilegalizada; José Manuel Serra y Amaia Esnal Martiarena.

La décima detenida en la denominada «Operación Batea» es Ainara Oiz Elorriaga, que fue arrestada en el portal de la vivienda de Miren Zabaleta cuando portaba documentos y efectos extraídos de la vivienda de ésta para evitar que fuesen intervenidos.

Otegi, Etxebarria, Díaz Usabiaga, Jacinto y Rodríguez fueron arrestados en la sede del sindicato LAB en San Sebastián, donde según la acusación se habrían reunido los dirigentes proetarras en varias ocasiones durante las últimas semanas; mientras que a Esnal y Serra los detuvieron en Hernani (Guipúzcoa) y a Zabaleta y Moreno en Pamplona.

Los arrestados habrían formado un grupo llamado «Bateragune», que en euskera significa punto de encuentro y que sería el germen de una futura Mesa Nacional, que al parecer tenía como primer objetivo el regreso de Batasuna-ETA a las instituciones políticas del País Vasco, según el Ministerio del Interior.