Hacemos hoy aún más explícita nuestra denuncia contra quienes, escondidos tras el tinglado etarra, justifican y alientan el entramado de mentiras históricas e ideológicas que alimentan la locura nacionalista y ensanchan el vórtice fatal de odio entre los españoles
Hoy España ha vuelto a sufrir el consabido ritual de duelo y asco. Duelo, por la muerte de uno de los servidores de la Patria: el oficial Luis Conde de la Cruz; asco, por la enésima puesta en escena de un ritual obediente a las pautas que marca la cobardía, la inercia y deriva institucional disfrazadas de declaraciones altisonantes en nombre de una pretendida “fortaleza” democrática frente al “terror”.
Pero, ¿el terror por parte de qué o de quien? Hasta que los españoles no seamos todos conscientes de que este terror tiene no uno -el de la ETA- sino muchos nombres propios; de que no hablamos de una violencia abstracta, sino de la meditada y consciente voluntad de acabar con la Nación común que ampara nuestro Estado de derecho; y de que buena parte de los culpables siguen tomando, hipócritamente, la pluma, el micrófono o el primer plano en ocasiones como esta para proclamarse “demócratas” mientras siguen promoviendo el nacionalismo excluyente y dando así alas a la bestia separatista… hasta entonces, ni un ápice habremos ayudado a evitar el derramamiento de sangre por España.
La Fundación DENAES para la Defensa de la Nación Española hace hoy aún más explícita su denuncia contra quienes, escondidos tras el tinglado etarra, justifican y alientan el entramado de mentiras históricas e ideológicas que alimentan la locura nacionalista y ensanchan el vórtice fatal de odio entre los españoles; e invoca, más que a un gobierno enfangado ya desde hace tiempo en el camino de la rendición y la vergüenza, a la Justicia y a los partidos con diginidad y conciencia nacional a que reaccionen -si aún estamos a tiempo- para extirpar del tejido político de la Nación aquellos tumores que la consumen.
Felicitamos, en este sentido, al Tribunal Supremo por su actuación reciente marcando la línea -la única línea- de debe seguirse en la lucha contra el entramado secesionista, recordando sin embargo que la labor no estará cumplida hasta eliminar por completo cualquier presencia o influencia de aquél en las instituciones del Estado. Y nos solidarizamos con la familia del brigada Luis Conde, a la que enviamos nuestro más sentido pésame junto al recordatorio de que nunca, nunca se vierte en balde la sangre por la Patria.
FUNDACIÓN DENAES, PARA LA DEFENSA DE LA NACIÓN ESPAÑOLA
