La Voz de Barcelona
La mejor defensa es un buen ataque, ha pensado Oriol Pujol, secretario general de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC). En medio de la acusación de posible financiación ilegal de su partido y la que le señala como miembro de una posible trama de corrupción, ha enviado una carta a las bases de CDC recordándoles que la culpa la tiene… ‘el españolismo intransigente’.
Desviar el foco de atención, o, a lo mejor, una simple casualidad. Sea lo que sea, el caso es que Pujol, este jueves, ha enviado una misiva a los militantes de CDC acusando a los ‘sectores más rancios y conservadores del españolismo intransigente’ de intentar difamar a los nacionalistas. Sin citarlos, Pujol se refiere a las acusaciones judiciales de corrupción que asolan a su formación y a él, personalmente.
‘No lo permitiremos’
Para el número dos de CDC y portavoz de CiU en el Parlamento autonómico, esta reacción contra los nacionalistas se debe a que desde el Gobierno autonómico se ha puesto en marcha ‘la transición nacional catalana que tiene su primera estación en la consecución de la hacienda propia’, al margen de la Agencia Tributaria nacional.
Pujol ha situado el ‘punto de no retorno hacia la libertad’ el último pleno parlamentario que aprobó la propuesta de concierto económico para la Generalidad, que Artur Mas (CiU), presidente autonómico, presentará a Mariano Rajoy (PP), presidente del Gobierno, como propuesta en la negociación del nuevo modelo de financiación para las CCAA.
Así, el número dos de CDC se ha dirigido a los militantes de la formación (que mantiene a Jordi Pujol como presidente fundador en la dirección del partido):
‘Como ya has podido comprobar, esta firmeza de planteamientos que estamos demostrando ha encendido las iras de los sectores más rancios y conservadores del españolismo instransigente, que están calumniándonos, difamándonos y mirando de dilapidar nuestro prestigio y nuestro buen nombre. No lo permitiremos y defenderemos nuestro honor con uñas y dientes, porque el buen nombre de Convergència es patrimonio de todos los militantes, de todos aquellos que hace tantos años trabajáis para levantar este país [por Cataluña] y llevarlo a un futuro lleno de oportunidades y situarlo entre las grandes naciones de Europa y el mundo’.
Por ello, Pujol les ha alentado a que, ‘sin miedo’, miren ‘adelante’ porque ‘sabemos dónde estamos y a dónde vamos’. Finalmente, en la carta, el dirigente de CDC les ha advertido de que ‘intentarán dividirnos y debilitarnos, pero sabemos que contamos con el activo más importante, que es el capital humano que forman los hombres y las mujeres de Convergència’. Estas palabras van en la línea de las manifestadas, recientemente, por el propio Mas, ante unos 300 altos cargos de la Generalidad.
De ‘partícipe a título lucrativo’ a ‘colaborador necesario’… 30 años después
En las últimas semanas la posible corrupción de CDC ha saltado, otra vez, a las portadas de los informativos. Así, el juez que investiga el caso Palacio de la Música, Josep Maria Pijuan, ha declarado a esta formación ‘responsable civil, como partícipe a título lucrativo’ del desfalco de la entidad musical. CDC ha tenido que depositar una fianza de 3.297.079,01 euros para evitar el embargo de sus bienes.
Al margen, el propio Oriol Pujol ha aparecido como ‘colaborador necesario’ de la posible trama de corrupción que obtenía concesiones de ITV por parte de la Generalidad. Así lo ha dejado negro sobre blanco la magistrada titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Barcelona, Silvia López Mejía, encargada de la investigación.
Curiosamente, hace ahora 30 años del inicio del caso Banca Catalana que protagonizó el padre de Oriol, Jordi Pujol, y que desde el nacionalismo, como ahora, se denunció de ser una acción contra Cataluña.