La Voz de Barcelona
El proyecto nacionalista de construcción de una red de medios de comunicación afín a sus propósitos continúa con paso firme. El precario estado de las cuentas de la Generalidad no ha sido motivo suficiente para que el presidente autonómico, Artur Mas (CiU), haya reconsiderado su política de ayudas multimillonarias a la prensa.
Esta semana, el departamento autonómico de Presidencia ha convocado una nueva ronda de subvenciones a fondo perdido para los medios de comunicación privados de todo tipo, desde medios impresos a diarios digitales, pasando por radios y televisiones. En esta ocasión, el botín a repartir asciende a 9.468.979 euros, y, como es habitual, solo hay un requisito imprescindible para poder optar a ellas: utilizar la lengua catalana o la aranesa.
En concreto, según recoge el Diario Oficial de la Generalidad de Cataluña (DOGC), Mas otorgará 3.194.000 euros a publicaciones periódicas (diarias y no diarias) en soporte papel (PRE/1314/2012); 1.270.979 euros (ampliables en otros 666.000 euros) a proyectos que fomenten y consoliden el espacio catalán de comunicación para empresas periodísticas privadas editoras de prensa en soporte de papel (PRE/1303/2012); 855.000 euros a medios informativos digitales de titularidad privada (PRE/1300/2012); 777.000 euros a emisoras de televisión digital terrestre de empresas privadas para proyectos que fomenten y consoliden el espacio catalán de comunicación (PRE/1308/2012); 763.000 euros a proyectos que fomenten y consoliden el espacio catalán de comunicación para empresas periodísticas privadas editoras de prensa digital (PRE/1307/2012); 713.000 euros a emisoras de radio de empresas privadas para proyectos que fomenten y consoliden el espacio catalán de comunicación (PRE/1306/2012); 550.000 euros a emisoras de radio de titularidad privada (PRE/1299/2012); 400.000 euros a a emisoras de televisión de titularidad privada (PRE/1310/2012); y 280.000 euros a entidades sin ánimo de lucro para proyectos que contribuyan al fomento del periodismo y del espacio catalán de comunicación (PRE/1309/2012).
Discriminación por motivos ideológicos
Las subvenciones convocadas esta semana desarrollan las bases publicadas el pasado 27 de junio que, por primera vez, reconocen explícitamente y justifican la discriminación por motivos ideológicos a la hora de establecer el criterio de reparto. En concreto, la exposición de motivos indica lo siguiente:
‘Es tarea del Gobierno [autonómico] apoyar y proteger las iniciativas de este sector para garantizar que las fuerzas del mercado no impidan el desarrollo de proyectos que contribuyan a garantizar el derecho a la información de todos los ciudadanos y la consolidación de la identidad nacional del país [por Cataluña]‘.
Además, evita citar al español, lengua cooficial en Cataluña, al que sitúa al mismo nivel que una lengua extranjera:
‘Cataluña cuenta con un sector privado de la comunicación en lengua catalana y occitana/aranesa, sólido y emprendedor, que contribuye día a día a la construcción del espacio catalán de comunicación. Este sector ha de enfrentarse a una situación de desventaja competitiva respecto a otros medios hechos en otros idiomas con muchas más expectativas de mercado’.
El grupo Godó, el gran afortunado
Las cantidades entregadas por el Ejecutivo autonómico a los medios de comunicación en los últimos años es inabarcable y difícil de cuantificar en su totalidad. A modo de ejemplo, en el año 2010, y únicamente desde la Consejería de Cultura, la Generalidad otorgó subvenciones directas a los diarios impresos por más de diez millones de euros con la única condición de estar escritos en catalán. A esto hay que sumar más de tres millones de euros para los medios digitales y otros 2,8 millones de euros para las radios y las televisiones. Y en 2011, solamente desde el departamento de la Presidencia, los diarios recibieron 2,1 millones en subsidios.
Sin embargo, sobresale el caso del grupo Godó, que, únicamente desde septiembre pasado, ha recibido más de nueve millones de euros en ayudas de todo tipo, principalmente en subvenciones directas y publicidad institucional, pero también a través de suscripciones de las consejerías y otros entes autonómicos y municipales.
Preguntado hace unos días por esta circunstancia, el portavoz de la Generalidad, Francesc Homs (CiU), consideró que esta preferencia hacia el grupo editor de La Vanguardia en el reparto de las subvenciones es algo “razonable”.