Durante el tradicional mensaje institucional de fin de año.


Varios momentos de la grabación del discurso de fin de año del presidente de la Generalidad, Artur Mas (fotos: TV3).

Varios momentos de la grabación del discurso de fin de año del presidente de la Generalidad, Artur Mas (fotos: TV3).

Redacción
Jueves, 30 de diciembre de 2010 | “Nos hace falta reaccionar ante las amenazas contra nuestra realidad nacional. Nos hace falta hacerlo con serenidad y con firmeza. Y nos hace falta hacerlo todos juntos, mirando más lo que nos une que lo que nos separa. Nuestro país tiene sensibilidades culturales o nacionales diferentes o mezcladas. Pero a todos, sin excepción, a los casi 7,5 millones de catalanas y catalanes, nos corresponde ser dignos continuadores del legado que hemos recibido de la historia. Sin embargo, también a todos nos corresponde contruir nuestro proyecto común de futuro, sabiendo qué somos, quién somos y de dónde venimos, pero a la vez hacia dónde queremos ir, qué nuevos horizontes queremos vislumbrar”. Con estas palabras se ha dirigido el nuevo presidente de la Generalidad, Artur Mas (CiU), a los ciudadanos de Cataluña en el tradicional mensaje institucional de fin de año.

El líder nacionalista ha denunciado “las incertezas y amenazas” que “planean sobre nuestra realidad nacional catalana”, y ha señalado que “la incomprensión, y más de una vez la hostilidad, hacia nuestra personalidad colectiva y nuestra identidad cultural y lingüística deberían haber quedado definitivamente superadas en una democracia consolidada como la que compartimos con el resto del Estado”, pero “desgraciadamente, no es el caso”.

Mas, retomando el victimismo característico de la etapa de Jordi Pujol (CiU), ha insistido en que “cualquier aspiración de mayor autogobierno es presentada como un privilegio; cualquier demanda de un trato fiscal más justo es rápidamente tildada de poco solidaria; cualquier acción de afirmación de nuestra cultura o de nuestra lengua es catalogada como un afán de cerrarnos en nosotros mismos como si fuésemos un pueblo de mentalidad provinciana”.

“Cataluña quiere más autogobierno porque ama la libertad”

Sin embargo, en su opinión, “Cataluña quiere más autogobierno porque ama la libertad; Cataluña aspira a un trato fiscal más justo porque valora el esfuerzo; Cataluña sabe que su identidad se fundamenta sobre todo en su cultura; y a la vez tiene un afán permanente de proyectarse y darse a conocer de puertas afuera”.

Así, ha considerado que “son momentos como los actuales los que demuestran que los pueblos y los países son dignos de su historia y del futuro que tienen que construir”, después de haber recordado “nuestra existencia milenaria como pueblo, como cultura” y “la voluntad de la nación catalana de mantener su identidad y de regir su propio futuro“.

Pide un esfuerzo colectivo para superar la crisis

Por otra parte, el eje central de su discurso -de poco más de siete minutos- ha girado en torno a la crisis económica, asegurando que tiene “el firme propósito de hacer de la recuperación económica y la creación de trabajo” su “principal prioridad”, algo que ha asegurado que es “una tarea colectiva” de todos.

“No es hora solo de reclamar derechos, sino de cumplir deberes”, ha continuado, y ha desvelado la fórmula de la recuperación: “trabajo duro, esfuerzo, sacrificio, imaginación, creatividad, moral de victoria y convicción en nuestras posibilidades“.

Para ello, ha pedido “a todas aquellas personas que tienen más posibilidades o capacidades”, y que tienen “un cierto deber moral” de apoyar a los que peor lo pasan, que colaboren “poniendo en juego su talento, su experiencia, sus habilidades, o simplemente entregando una parte de su tiempo para ayudar”. “La suma de nuestros esfuerzos nos hará más grandes como nación y mejores como personas. La grandeza de un país radica en la grandeza de su gente, en la grandeza de cada uno de nosotros”, ha concluido.