Las fuerzas de seguridad francesas y españolas detuvieron el sábado, en distintas operaciones, al jefe militar de la organización armada separatista vasca ETA, así como a otros ocho presuntos miembros de ese grupo, confirmó el gobierno español este domingo.

Imagen sin datar de Jurdan Martitegi, el presunto jefe militar de la banda armada ETA
Jurdan Martitegi, sospechoso de ser el principal dirigente militar de ETA, fue detenido en el pueblo de Montauriol, en el sudeste de Francia, en compañía de otros dos presuntos miembros del grupo armado -Alexander Uriarte Cuadrado y otra persona aún no identificada-, anunció el Ministerio del Interior español confirmando informaciones de prensa.
Según el comunicado del ministerio español, en la jornada otros seis presuntos miembros de ETA fueron detenidos en las ciudades de Bilbao, Vitoria y Rentería, en el norte del País Vasco español.
Martitegi es el tercer alto jefe de ETA que es detenido en seis meses, después de Aitzol Iriondo y de Garikoitz Aspiazu, «Txeroki».
En Montauriol, la policía se incautó de tres pistolas, dos coches, uno de ellos con placas de matrícula falsas, y un «contenedor» del tipo que usa ETA habitualmente para fabricar bombas, señala el comunicado, que precisa que en el momento de su detención, los tres sospechosos estaban armados.
El alcalde de Montauriol, Patrick Mauran, dijo que los tres hombres fueron detenidos cerca de la iglesia del pueblo, horas después de haber llegado a lo que parecía ser una reunión. «Ninguno de ellos vivían aquí», dijo a la AFP.
El ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, declaró que «Martitegi es considerado el máximo responsable del aparato militar de ETA».
La agencia de noticias Vasco Press dijo que Martitegi, 28 años, había sido miembro de una de las células más activas de ETA, el comando Vizcaya, que fue desmantelado por la policía española el pasado mes de julio.
Martitegi, considerado como un cuadro particularmente violento, fue al parecer el sucesor como jefe militar de ETA de Aitzol Iriondo, arrestado también en Francia el 8 de diciembre.
A su vez, Aitzol Iriondo había sucedido a Garikoitz Aspiazu, también llamado «Txeroki», detenido igualmente en Francia un mes antes.
La operación conjunta franco-española comenzó con las investigaciones realizadas por la policía nacional española en el País Vasco, señaló el ministerio del Interior hispano.
La operación fue coordinada por Baltasar Garzón, el juez especialista de los asuntos de terrorismo de la Audiencia Nacional, el tribunal español encargado de estos temas, afirmaron los medios españoles.
En una declaración emitida tras conocerse los informes iniciales sobre las tres detenciones en Francia, el Partido Socialista del presidente de gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se congratuló por las «excelente noticia» y felicitó a las fuerzas de seguridad «por su trabajo constante e intenso para acabar con el terrorismo dentro y fuera» de España.
«Es una tarea que, sin duda, cuenta con la máxima colaboración de los cuerpos de seguridad de otros países tal y como, una vez más, acaba de demostrar Francia», añadió.
«Los terroristas deben saber que el único camino que toman con sus acciones es el de la cárcel», puntualizó el partido.
En los últimos meses fueron detenidos a ambos lados de la frontera franco-española numerosos responsables y presuntos miembros de ETA. Desde el principio del 2009, en total, 11 de ellos fueron arrestados en Francia y 11 en España, según los medios de comunicación españoles.
ETA, que es considerada una organización terrorista por la Unión Europea y por Estados Unidos, es responsable de 825 muertes en sus más de 40 años de violencia por la independencia del País Vasco.
A mediados de 2007 reanudó sus atentados luego de una tregua de 15 meses, tras frustrarse las negociaciones con el gobierno español.
ETA advirtío este mes que seguirá adelante con sus acciones violentas y había fijado como «objetivo prioritario» a los «responsables políticos» del próximo gobierno del País Vasco, que será presidido por el socialista Patxi López, tras 30 años en el poder del partido nacionalista PNV.