Ha querido ser la primera comunidad en presentar un modelo propio de financiación autonómica al margen del que aporta el Estatut catalán

8-5-2008 – LA VOZ DE GALICIA
Miguel Á. Rodríguez
La Xunta ha querido ser la primera comunidad en presentar un modelo propio de financiación autonómica al margen del que aporta el Estatut catalán. El conselleiro de Economía, José Ramón Fernández Antonio, lo hizo público ayer por la mañana y, minutos después, voló a Madrid para entregarlo en el Ministerio de Economía, que convocará en el plazo de un mes el Consejo de Política Fiscal y Financiera para abrir oficialmente el debate en toda España.
A falta de consensuar la propuesta con el PP y el BNG, la Xunta aporta un esquema basado en los principios de suficiencia financiera y dinámica, igualdad en la calidad de los servicios y la introducción de factores diferenciales.
Fernández Antonio hizo las cuentas en voz alta. Galicia quiere que el 90% de la recaudación del IVA, el IRPF y los impuestos especiales, la gran bolsa tributaria, le sea devuelto de dos maneras. Una, con mayores cesiones fiscales (ahora mismo la Xunta controla el 33% del IRPF, el 35% del IVA y el 40% de los impuestos especiales). Y el resto mediante el Fondo de Suficiencia. «No voy a decir qué porcentajes exactos de los impuestos queremos controlar -aclaró el conselleiro-, porque lo que en realidad nos debe preocupar a las comunidades es garantizar que entre la fiscalidad y el Fondo de Suficiencia nuestras necesidades se cubran adecuadamente».
Y para calcular esas necesidades, Galicia pone encima de la mesa sus propios «factores diferenciales»: dispersión y envejecimiento poblacional, orografía y kilómetros de litoral. Cada una de ellas irá acompañada de informes que demuestran el peso relativo de estas peculiaridades en la prestación de los servicios. Por ejemplo, la población mayor de 65 años provoca que el gasto sanitario sea 3,5 veces mayor en Galicia que la media española. Datos similares se manejan para los servicios sociales, el transporte escolar o las infraestructuras.
La Xunta quiere una revisión quinquenal de todos estos criterios, incluida la población. Pero rechaza una financiación «a la catalana», que implicaría una cantidad por habitante. «Nosotros lo que planteamos es que la financiación garantice una calidad idéntica en los servicios», sentenció Fernández Antonio.
Más fondos estatales
Galicia también pedirá al Estado que se rasque el bolsillo. Exige duplicar el Fondo de Compensación Interterritorial, dotándolo al menos con 2.000 millones de euros, el doble de su actual contenido. Y un «incremento significativo» del Fondo de Suficiencia como herramienta de cierre del sistema. Además, no aceptará un cálculo de las necesidades de las comunidades que no se aplique sobre «todos los servicios transferidos», y no solo sobre sanidad, educación y los servicios sociales, como quiere Cataluña. Entre esos servicios, la propuesta de reforma gallega insta también al Estado a que dote los fondos necesarios para garantizar «el cumplimiento de los planes estratégicos de infraestructuras».
Y todo ello en un marco de negociación multilateral, «donde estemos todos», dijo el conselleiro, «y no a dos bandas», como sugieren los catalanes.