El proyecto de sentencia, que no ha sido sometido aún a votación oficial, cuenta ya con el rechazo expreso de la mayoría conservadora del Alto Tribunal

2-5-2008 – EL MUNDO
BARCELONA.- El Tribunal ha discutido ya el Preámbulo del Estatut, donde se recoge este término, y podría admitirlo al considerar que carece de valor normativo La sentencia lo compensaría excluyendo la ‘bilateralidad’ en las relaciones entre el Estado y la Generalitat de Cataluña que establece el texto.
Casi un año y medio después de que se admitiera a trámite el recurso presentado por el Partido Popular contra el Estatut de Cataluña, el Pleno del Tribunal Constitucional ha abierto en su seno un debate sobre la cuestión y, aunque aún no ha alcanzado un fallo definitivo, ya hay un borrador de sentencia. En él se acepta que el Preámbulo se refiera a Cataluña como una ‘nación’, al entender que esta definición no conlleva ningún efecto jurídico en el conjunto de España, pero no avala, sin embargo, la presunta ‘bilateralidad’ entre Cataluña y el Estado que propugna este marco estatutario.
Según informa este viernes ‘La Vanguardia’, este proyecto de sentencia todavía no ha sido sometido a votación oficial y está en fase de discusión por parte de los 11 magistrados que resolverán los recursos planteados, después de que se aceptara la recusación de Pablo Pérez-Tremps.
Rechazo de la mayoría conservadora
Por lo pronto, este texto habría recibido ya el rechazo expreso de la mayoría conservadora del Alto Tribunal, aunque también el aval de otros cinco magistrados, entre ellos el de su presidenta, María Emilia Casas.
El sector conservador del Pleno del Constitucional, encarnado por los magistrados Javier Delgado, Jorge Rodríguez-Zapata, Roberto García Calvo, Vicente Conde o Ramón Rodríguez Arribas, ya ha dejado clara su discrepancia con el borrador de sentencia y con el aval al término «nación» para referirse a Cataluña.
Sin embargo, otros cinco magistrados: Eugeni Gay, Manuel Aragón, Elisa Pérez Vera, Pascual Sala y la presidenta del Constitucional, María Emilia Casas, aceptarían esta redacción, contraria a los recursos presentados en su día por el PP o por el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica. En el aire queda todavía el sentido del voto que coresponde al vicepresidente del TC, Guillermo Jiménez, y que podría desempatar entre las dos corrientes ahora discrepantes de un Pleno que votará en su totalidad la sentencia.
Respecto al término «nación», el borrador que se debate en el Constitucional considera que su uso, en este caso, no choca abiertamente con lo establecido en el Artículo 2 de la Carta Magna, puesto que el preámbulo del Estatut fue retocado en su día, no define abiertamente a Cataluña como una nación, sino que lo establece de una forma indirecta: «El Parlament, recogiendo el sentimiento y la voluntad de la ciudadanía catalana, ha definido a Cataluña como nación».
Este hecho, sumado a la ausencia de validez jurídica de los preámbulos, podría llevar al TC a respladar el uso del término «nación» para definir a Cataluña, siempre que quede claro, eso sí, que no existe una relación de «bilateralidad» entre Cataluña y el Estado.