Sus propuestas más osadas: la enseñanza del himno gallego y el uso por parte de los niños de mandilones que signifiquen la identidad gallega.
09-09-2007-ABC
SANTIAGO. El proyecto estrella del ariete nacionalista en Galicia, Anxo Quintana, echó a andar el lunes día 3. Las primeras 23 de su red de 121 «galescolas» o guarderías para niños de 0 a 3 años que implantará por toda la comunidad abrieron sus puertas con el 85% de sus plazas cubiertas, unos pequeños a los que se busca «galleguizar» desde la infancia para lograr dar un vuelco al informe del Consejo Escolar en Galicia, que dictaminó el «preocupante» nivel de uso en que se sitúa la lengua de Rosalía de Castro por parte de los jóvenes.
Quintana, líder del BNG y que ostenta las competencias de Igualdad y Bienestar, pero no de Educación (en manos del PSOE) ha chocado con sus socios y también con la oposición en dos de sus propuestas más osadas: la enseñanza del himno gallego y el uso por parte de los niños de mandilones que signifiquen la identidad gallega. Tras la gran polvareda que levantaron, sin uno ni otros ha comenzado a funcionar esta experiencia piloto. «Se quiere que todos los niños piensen y vistan igual», denuncia la portavoz del ramo del PP gallego.
Otro proyecto que se estrena este curso, que en Galicia arranca el miércoles, es el Decreto de Enseñanza en Lengua Gallega, que se traducirá en la enseñanza de todas las materias al 50 por ciento entre el castellano y el gallego. Pese a que la iniciativa contó con el respaldo de los tres partidos la pasada primavera, ahora se presenta como un auténtico campo de minas, sacudido por varias entidades detractoras y la oposición de padres y alumnos que ven en el «fifty-fifty» serios peligros. El más grave: el reparto de áreas entre un idioma y otro que ha fijado la Consejería de Educación, con la intención de que «como mínimo, la mitad de la enseñanza sea en gallego».
En la etapa Infantil, la docencia se inclinará del lado de la lengua «predominante» entre el alumnado, aunque se fomente la adquisición progresiva de la lectura y la escritura en el idioma de Cunqueiro. El gallego se reservará, en Primaria y Secundaria, para Matemáticas, Conocimiento del Medio Natural, Social y Cultural, Ciencias Sociales, Geografía e Historia, y la controvertida Educación para la Ciudadanía. Desde este curso, también se impone el 50% en FP, enseñanzas de adultos y Bachillerato.