Sin embargo, y sin perjuicio de que como decimos las palabras de Cospedal nos parezcan sin duda muy ajustadas puesto que, ciertamente, los planteamientos de Zapatero conducen inevitablemente a la legitimación de la desigualdad (por ejemplo, en este caso, tributaria) entre los ciudadanos de la Nación, creemos inexcusable la corrección de otras desigualdades tributarias injustas, como los conciertos económicos, que también enfrentan y dividen internamente al PP en distintas comunidades autónomas.


montilla2.jpg En el transcurso de su discurso ante los delegados reunidos en el IX
Congreso provincial del Partido Popular de Álava, María Dolores de
Cospedal, secretaria general del PP, ha tenido ocasión de denunciar,
«por
bochornosa», la reciente reunión de José Montilla y Manuel Chaves con
José
Luis Rodríguez Zapatero en el Palacio de la Moncloa para discutir el
nuevo
sistema de financiación autonómica. Según doña María Dolores, tal
reunión,
precisamente por haber tenido lugar del modo más disimulado, «de
tapadillo», resultaría una suerte de cacicada sencillamente
impresentable
siendo, por lo demás, la financiación autonómica una cuestión «que
afecta
a todas las Comunidades Autónomas» y que, en consecuencia, «debe
aprobarse
con la unanimidad de todas las Comunidades Autónomas».

En este mismo sentido, Cospedal habría terminado su discurso
concluyendo
que el PP «defiende un sistema de financiación que garantice la
igualdad
mientras que Zapatero defiende la desigualdad».

Pues bien, desde la Fundación DENAES para la Defensa de la Nación
Española
no podemos sino manifestar nuestra amplia coincidencia con el
diagnóstico
de la secretaria general del PP dado que, en efecto, tenidas como la
celebrada el sábado por Zapatero con Chaves y con Montilla representan
el
indicio más seguro de que el «nuevo sistema de financiación» que el
gobierno del PSOE estaría tratando de negociar — justamente, para más
inri, bajo la presión constante y vergonzosa del PSC con sujetos como
José
Montilla a la cabeza— tenderá sin duda, a profundizar, acaso muy
radicalmente, en la «desigualdad» ramplante entre diferentes partes de
la
Nación Española. Una «desigualdad» que, sancionada en parte por la
Constitución de 1978, estaría saliendo adelante bajo la pretensión —
ella
misma inadmisible— de que resultaría necesario hacer justicia, «desde
Madrid», a las aportaciones tributarias de Cataluña por ejemplo, como
si
efectivamente cupiese decir —dando en este sentido la razón a los
secesionistas en una de sus premisas esenciales— que «Cataluña tributa
como tal». Pero esto sencillamente no es cierto.

Sin embargo, y sin perjuicio de que como decimos las palabras de
Cospedal
nos parezcan sin duda muy ajustadas puesto que, ciertamente, los
planteamientos de Zapatero conducen inevitablemente a la legitimación
de
la desigualdad (por ejemplo, en este caso, tributaria) entre los
ciudadanos de la Nación, creemos inexcusable la corrección de otras
desigualdades tributarias injustas, como los conciertos económicos, que
también enfrentan y dividen internamente al PP en distintas
comunidades autónomas.

FUNDACIÓN DENAES, PARA LA DEFENSA DE LA NACIÓN ESPAÑOLA