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El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha elegido a Carlos Espinosa de los Monteros como alto comisionado para la Marca España por todo el mundo, según ha difundido EFE, tarea en la que tendrá que coordinar todos los departamentos que tienen responsabilidad en la proyección exterior de la imagen del país. El nuevo cargo tendrá rango de secretario de Estado y estará adscrito al Ministerio de García-Margallo.

Carrera meteórica desde el INI
La biografía oficial de Espinosa de los Monteros destaca su amplio historial como directivo de empresas de peso: vicepresidente del Instituto Nacional de Industria (INI) de 1979 a 1982, presidente de Iberia de 1983 a 1985, consejero delegado y presidente de Mercedes Benz España y del grupo surgido tras la fusión con Daimler Chrysler de 1988 a 2009 y en la actualidad vicepresidente de Inditex, una de las empresas españolas con mayor proyección mundial. Tiene presencia en los consejos de administración de otras empresas, como Acciona o la Mutua Fraternidad Muprespa.

Las tesis de la patronal
Pero se trata de un directivo con un fuerte perfil ideológico y que se autodefine como “liberal” y contrario al intervencionismo, a pesar de que dio sus primeros pasos nada menos que el INI –el organismo que gestiona las empresas públicas- y en Iberia cuando la compañía aérea aún no se había privatizado. Presidió el Círculo de Empresarios y es un habitual defensor de las tesis de la patronal, de hecho ha sonado en diferentes ocasiones para liderar la patronal. Aunque finalmente ha llevado su labor ideológica a través de diferentes think tanks en los que criticaba la gestión de la crisis del Gobierno socialista y clamaba por una flexibilización del mercado laboral como principal problema económico del país.

Plataformas liberales…
En la actualidad, Espinosa de los Monteros es vicepresidente de Civismo y Libertad, una plataforma liberal que fundó junto a Pedro Schwartz –el elegido por Esperanza Aguirre para encabezar el Consejo Económico y Social de Madrid- y Francisco Cabrillo – presidente del grupo Libertad Digital del periodista Federico Jiménez Losantos-. El pasado martes Civismo entregó su premio ‘Sociedad Civil’ a Esperanza Aguirre, quien recibió el galardón de manos del escritor Mario Vargas Llosa. Precisamente este lunes se difundía que el escritor peruano recibirá el “premio FAES de la Libertad’ de 2012 a propuesta del presidente de la fundación ideológica popular, José María Aznar.Civismo y Libertad ha promocionado las tesis desregulatorias del nuevo gobernador del Banco de España, como informó ELPLURAL.COM, y ello cuando los excesos del sector financiero se están pagando todavía en la actual crisis.

…. y patrióticas vinculadas al PP
Además, el directivo fue premiado este año por la fundación DENAES, la que preside el exdirigente del PP vasco Santiago Abascal, en la actualidad alto cargo en el Gobierno regional de Aguirre, y en la que participa también activamente el eurodiputado Aleix Vidal-Quadras. DENAES –la fundación que secundó a Aguirre en el intento de penar los silbidos al himno en los partidos de fútbol- concedió a Espinosa de los Monteros uno de sus galardones “Español Ejemplar”, que premian el “patriotismo”. La fundación presentaba así al premiado: “Lejos de representar el modelo de empresario dependiente del sector público y silente, se ha atrevido a señalar en voz alta algunos de los más graves problemas de España: la demonización del espíritu emprendedor, o el sistema autonómico asociado al despilfarro, entre otros. Además, reconocemos a Carlos Espinosa de los Monteros como un gran defensor de los valores tradicionales de los españoles: el honor, el respeto a la palabra dada y el cumplimiento de las obligaciones”. También participó en el seminario de FAES ‘Hablemos de libertad económica y progreso’ junto a Aguirre y al economista ultraliberal Xavier Sala-i-Martí -que fue directivo de Laporta en el FC Barcelona-.

Contra los sindicatos o contra Francia
Una síntesis de la visión empresarial de Espinosa de los Monteros apareció en una entrevista de 1999 a El Mundo. Entonces, mientras se ponían los cimientos de la burbuja inmobiliaria y los desequilibrios fiscales que han lastrado al país, otorgaba un aprobado a la política privatizadora y fiscal –bajada de impuestos directos- del primer mandato de Aznar y le daba “un suspenso, y con mucho, en materia laboral”, ya que defiende la desregulación del mercado laboral. De los sindicatos decía que son organizaciones “en vías de extinción”. “¿Cuándo se ha visto que Francia haya brindado una idea buena a los españoles?”, se preguntaba también en relación a la apuesta que hizo entonces el país galo por las 35 horas laborales a la semana como una medida para incrementar el empleo y mejorar la calidad de vida de los trabajadores.

Germanófilo con matices
Los vínculos de este directivo con el empresariado alemán tras sus años en Mercedes-Benz parecen también un activo en estos momentos claves de redefinición de la UE. De hecho elogiaba el modelo germano de planificación y disciplina en un libro sobre las relaciones hispano-alemanas publicado por la Universidad Complutense de Madrid en 2002. En cualquier caso dejaba este apunte: “Alemania ha sido el apóstol de la cogestión, esto es, de la participación de los trabajadores en la dirección y gestión de las empresas. En España, afortunadamente, el sistema de la cogestión no se ha impuesto, al margen de la participación de los sindicatos en las decisiones de las empresas, y ésta sigue en manos de los representantes de las empresas”.