Sin duda los que más exultantes se mostraron fueron los batasunos.
26-10-2006-La Razón
Estrasburgo- La resolución de socialistas, liberales, verdes e Izquierda Unida apoyando el «proceso de paz» iniciado por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, salió ayer adelante en el Parlamento Europeo por un estrecho margen de 10 votos. La apoyaron 321 diputados frente a 311 que votaron en contra, y los 24 que se abstuvieron. Previamente, el texto presentado por los populares y el Grupo de la Unión por la Europa de las Naciones fue derrotado por veinte votos.
La votación no estuvo exenta de tensión y enfrentamientos. Una cuestión técnica aplicada por el presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell, que pidió el voto electrónico en vez de la mano alzada para votar una enmienda a la resolución popular, confundió a algunos diputados, especialmente polacos y checos, que votaron en contra de la resolución del PPE pensando que lo hacían contra el texto impulsado por los socialistas.
La diputada popular irlandesa Avril Doyle acusó a Borrell de defender los intereses socialistas, al negarse, en un principio, a repetir la votación. El presidente de la Cámara calificó las palabras de la europarlamentaria de «inaceptables». El cambio de parecer de Borrell no modificó el sentido del resultado, pero los 276 votos a favor de la resolución popular se convirtieron en 302.
Satisfacción a ETA
El eurodiputado del PP Jaime Mayor Oreja, que calificó el resultado de «pírrico», lamentó la división del Parlamento Europeo, como antes la del Congreso de los Diputados y tildó de «fracaso» el resultado obtenido por los promotores de la iniciativa y de «falsedad» los que hablan de «la soledad del PP». «El debate ha provocado tensión y da una satisfacción a ETA», añadió Mayor.
Diferente opinión mantuvo el parlamentario socialista Enrique Barón, que habló de «gran debate» en el que le llamó la atención «el mal perder que tienen algunos». Así, recomendó al PP que cambie su «discurso de insultos y ofensas».
Pero sin duda los que más exultantes se mostraron por el resultado de la votación fueron los batasunos, representados por uno de sus líderes, Joseba Álvarez, que no dudó en calificar la jornada como «día histórico». Sobre esta base, el dirigente de la formación ilegalizada instó al PSOE a que utilice este «blindaje internacional» para seguir avanzando «con más audacia» una vez que ha quedado claro que no contará con el respaldo del PP. Y ya que estaba, marcó la agenda: «el siguiente paso es poner en marcha en Euskadi el espacio de diálogo político y eso tiene que producirse lo antes posible, ojalá que sea antes de que empiece el ciclo electoral el año que viene».
En el debate celebrado tres horas antes de la votación, el comisario de Justicia, Libertad y Seguridad, Franco Frattini, preparó una alocución que fue aplaudida por casi todos. El comisario italiano recordó las más de ochocientas muertes, «el chantaje y la extorsión» de ETA, así como el último robo de armas en Francia, atribuido a la banda terrorista. El también vicepresidente de la Comisión rindió homenaje a las víctimas del terrorismo, a las que «hay que ayudar para restituir los daños producidos», al tiempo que definió de «ejemplar» y «tenaz» la actitud mostrada por la sociedad española, que ha conseguido el «debilitamiento de ETA».
Frattini se mostró convencido de que España buscará el mejor camino para acabar con el terrorismo etarra y pidió que acabe la división entre los partidos, porque «el enemigo es común». El comisario fue el orador más aplaudido de la sesión.
Entre los portavoces políticos hubo de todo: la verde italiana Monica Frasoni y el euroescéptico danés Jans-Peter Bonde, reconocieron el derecho de autodeterminación de los vascos. El popular Hans-Gert Poettering se preguntó: «¿Cómo podemos fiarnos de que ETA y Batasuna quieren la paz si no han pedido disculpas a las víctimas?», mientras el socialista Martin Shulz, citó una frase «maravillosa» en español: «Nos abriremos a la esperanza, a la generosidad y al perdón» y reveló que era de José María Aznar. La gran mayoría de oradores recordaron a las víctimas y expresaron las diferencias entre el caso irlandés y español. El norirlandés James Hughes Allister, de los no inscritos, desconfió de «aquellos que prometen paz y viven de la violencia», en referencia a ETA, Batasuna y el Sinn Fein.
Votos con sorpresa
Precisamente el Sinn Fein supuso una de las grandes sorpresas de la votación. La eurodiputada del brazo político del IRA, Bairbre de Brun, se abstuvo pese a que su partido mantiene tesis similares a las de Batasuna sobre esta cuestión. De Brun, que como parte del Grupo de Apoyo al País Vasco fue una de las promotoras del debate en la Eurocámara, explicó que votó en contra del texto del PP porque éste se opone al proceso de paz pero tampoco apoyó la resolución socialista porque no aborda los «problemas centrales» y por ello representa una «oportunidad perdida». «Es necesario que haya conversaciones con todos los partidos políticos, que se respete el mandato político de Batasuna, y que acaben los juicios espectáculo que se están produciendo», dijo De Brun.
El Partido Socialista Europeo fue el único grupo que mantuvo una férrea disciplina de voto a favor del texto, mientras que populares y liberales registraron fugas, que en todo caso fueron mínimas. Ningún popular votó a favor del apoyo al proceso de paz, pero seis parlamentarios de este grupo sí se abstuvieron.
De los socialistas europeos que votaron, todos lo hicieron a favor de la resolución de apoyo al proceso de paz. La española Rosa Díez explicó que no había votado por ninguno de los dos textos para expresar su rechazo a que se celebre en el Parlamento Europeo un debate sobre un conflicto que en su opinión no existe.