El Mundo
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, considera que el grupo de seis nuevos representantes elegidos por el Colectivo de Presos de ETA (EPPK) «son sólo unos presos más», según fuentes de su departamento, y ha recordado que su situación no se va a tratar nunca colectivamente sino de manera individual.
En ese sentido, ha insistido en que «mientras ETA no se disuelva no hay nada de lo que hablar» y se ha remitido a las palabras que pronunció después de que Amaiur solicitase el reagrupamiento de los presos de la banda. «El día que exijan a ETA su disolución, estarán en condiciones de pedir otras cosas», ha dicho el ministro.
Según ha expuesto el ministro este jueves, ahora es la propia ETA quien impide a los presos «ejercer libremente el derecho que la Ley les reconoce a los que quieran ejercerla». «ETA coacciona a sus presos y no les deja acogerse libremente a ese camino y en consecuencia no tienen acceso a los beneficios penitenciarios que la Ley establece para todo tipo de preso que quiera acogerse a esa vía», argumentó.
Por ello, insistió en que «esa es la política del Gobierno» y se mostró convencido de que «sería bueno que la conocieran los presos de ETA y los familiares».
«Si ETA se disuelve y deja de coaccionar a sus presos, los que lo deseen están en condiciones de ejercer libremente su derecho a la vía de la reinserción individual. Seguro que será mejor para ellos porque podrán tener acceso en el marco, sólo en el marco de la Ley, a los beneficios que hay para los presos, terroristas o no, que se acojan a esa vía», apostilló.