Comerciante, casado y padre de tres hijos -entre ellos el patrono de la fundación DENAES y presidente de VOX-, Santiago Abascal Escuza se afilió en 1976 a la Unión Nacional Española, el partido de Fernández de la Mora que en 1978 acabó integrado en Alianza Popular.
En 1987 ocupó su primer puesto de representación política en las Juntas Generales de Álava, dentro del grupo de Coalición Popular. Desde ese año formó parte del Comité Ejecutivo provincial, y desde 1995, cuando fue elegido concejal en el ayuntamiento de Amurrio, se incorporó también al Comité Ejecutivo del PP en el País Vasco. Fue reelegido tres veces consecutivas como juntero y concejal, y llegó a ser diputado nacional en 2004.
En 2015, y tras 35 años de militancia, abandonó el partido y la presidencia del PP en el Valle de Ayala. Sus ideas se resumían en «España y libertad» y por abanderar su defensa paso décadas en el punto de mira de la banda terrorista de ultraizquierda ETA. Los pistoleros le destruyeron dos veces el comercio y estuvieron muy cerca de acabar con su vida en varios atentados que frustró la Guardia civil. En su odio e impotencia escribían en las paredes «Abascal el siguiente». Y como las paredes no les asustaban decidieron pintar con amenazas los lomos de los caballos, como los nazis en «La vida es bella». La ETA les quemó el negocio familiar, provocando grandes daños económicos y el miedo en los clientes. A pesar del fuego etarra volvieron a abrir el negocio calcinado, y de nuevo fue pintado y apedreado. También fueron a por el vehículo dejando restos de un animal muerto como en las películas de mafiosos.
La responsabilidad y el amor a España le llevaron a encabezar la lista electoral de VOX en Álava en las últimas elecciones autonómicas vascas.
Santiago Abascal Escuza estuvo vinculado a DENAES desde sus comienzos.
El funeral se celebrará el próximo lunes 24 de julio a las 18.00 horas en la Parroquia de Santa María de Amurrio (Álava).
Desde DENAES acompañamos en su dolor a la familia. Nuestro más sentido pésame.