En las actuales circunstancias, votar al PSOE es avalar el pacto con ETA. nuestra obligación cívica es recomendar que no se vote al PSOE.
Estas elecciones se han convertido en un trance decisivo para la unidad de la nación española. Hace meses que el Gobierno les ha conferido un signo plebiscitario, mucho más allá del ámbito municipal y autonómico que en principio es el suyo. Tal y como el Gobierno ha presentado las cosas, todo voto al PSOE será interpretado como un aval para la política general de Zapatero, es decir, para la reforma confederalizante del Estado de las Autonomías y para el proceso de negociación con ETA. Así se ha denunciado, y con razón, desde distintos puntos del mapa político, lo mismo a la izquierda que a la derecha. En este paisaje, el votante queda obligado a pensar no en el candidato de su municipio o de su comunidad, sino en algo de mayor y más dramática trascendencia. La Fundación para la Defensa de la Nación Española considera que, en las actuales circunstancias, votar al PSOE es avalar el pacto con ETA. En la espera de que el PSOE vuelva a ser un partido nacional, nuestra obligación cívica es recomendar que no se vote al PSOE.
