Las concentraciones de mañana, 22 de mayo, que tanto está obstaculizando el Gobierno, tienen ahora un nuevo y poderoso aliciente.
Muchos sospechaban que los socialistas habían negociado con Batasuna-ETA antes de 2004, pero probablemente nadie imaginaba que esos contactos habían sido tantos y tan intensos como los que ha revelado el diario proetarra Gara. Los proetarras, contrariados porque el Gobierno les ha concedido menos listas de las comprometidas, han reaccionado ventilando el asunto. Nueva lección para Zapatero: no es posible traicionar a todo el mundo al mismo tiempo.
Traición es, en efecto, la única palabra posible. No puede definirse de otro modo la actitud de quien ha estado enarbolando el pacto antiterrorista y a la vez promovía acercamientos a la banda. Lo que ha hecho Zapatero es traicionar la seguridad de todos los españoles y la propia dignidad de la nación. En cualquier otro país, un mandatario sospechoso de tales cosas presentaría su dimisión.
Las concentraciones de mañana, 22 de mayo, que tanto está obstaculizando el Gobierno, tienen ahora un nuevo y poderoso aliciente.
