Quisiera denunciar algo que ha pasado desapercibido pero que es muy grave. El 4 de febrero de 2018 Pablo Iglesias Turrión fue entrevistado en El Objetivo, programa que dirige y presenta Ana Pastor en La Sexta (su cadena amiga). Lo que quiero denunciar puede verse aquí: https://www.youtube.com/watch?v=OQA-arV6GAI.
Tras ser entrevistado por la periodista, una mujer de 29 años llamada Noelia Paz le hizo una pregunta bastante pertinente: «Hay comunidades que tienen lengua propia y entonces no nos podemos presentar [a opositar] porque nos están exigiendo un nivel C1, como puede ser en Cataluña, en el País Vasco o en la Comunidad Valenciana. Entonces, estas personas que son de allí sí que se pueden presentar en el resto de España. ¿Qué opinas tú sobre esto?».
A lo que respondió el líder podemita: «Bueno, entiendo que se pueden presentar en el resto de España si manejan bien el castellano. En nuestro país se utilizan diferentes lenguas… Creo que hay que normalizar que en nuestro país existe una lengua común pero que también existen otras lenguas que necesitan de tanta o más protección que el castellano, como el catalán, el gallego o el euskera. Es verdad que alguien que habla dos idiomas tiene siempre ventaja con respecto al que habla un idioma. Quien habla castellano, inglés, catalán o francés pues tendrá ventaja sobre solamente quien hable catalán, o solamente hable castellano».
Y le replica la joven: «Sí, pero ¿no le parece injusto que, por ejemplo, yo, siendo castellana-leonesa, no pueda presentarme en Cataluña a una oposición y un catalán o un vasco sí pueda hacerlo en Castilla y León? Yo creo que está jugando una doble ventaja».
Y Turrión responde: «Si el vasco o el catalán no supieran castellano probablemente no se podría presentar en la oposición en Castilla y León. No le harían el examen en euskera o en catalán. Es verdad que tenemos un país que creo que ha despreciado lenguas que eran también españolas [que] yo eché en falta cuando fui al instituto… [Nunca me enseñaron] absolutamente nada sobre otras lenguas que eran también lenguas de mi patria. Creo que es fundamental no enfrentar a los maestros y a los profesores por algo que sigue siendo una asignatura pendiente en nuestro país, y estoy convencido que se pueden establecer fórmulas para que quien se vaya a formar para ser profesor en Cataluña o en el País Vasco pueda aprender una de las lenguas oficiales que también se hablan allí».
Éste es el personaje.
Daniel Miguel López Rodríguez. Doctor en Filosofía