La bomba estaba compuesta por 60 kilos de explosivo
19-5-2008 – LA RAZÓN
J. M. Zuloaga
ETA hizo estallar esta madrugada un coche bomba en el Club Marítimo de Guecho, en Vizcaya. Se trata del segundo atentado en una semana, con lo que se confirma que la banda ha decidido incrementar su actividad criminal.
La explosión, que pudo ser escuchada a muchos kilómetros de distancia, se produjo diez minutos antes de la una de la madrugada en una localidad que ha sido escogida por ETA para «castigar a la oligarquía vasca», como indicaba en comunicados en los que se hacía responsable de atentados similares. A la hora de cierre de esta edición se desconocían los daños causados, aunque alguna fachada de los edificios cercanos se había desplomado. No se han producido víctimas, ya que una hora antes una voz femenina, que decía hablar en nombre de ETA, avisó de la colocación de la bomba en una llamada a la central de la DYA. Se trataba de un mensaje creado con un programa de ordenador para evitar identificaciones. Inmediatamente, la Ertzaintza activó el protocolo habitual y cortó los accesos a dicho lugar, en el barrio de Las Arenas.
Fuentes antiterroristas consultadas por LA RAZÓN señalaron anoche que esta acción criminal va dirigida contra el PNV y contra los empresarios vascos. Cuando ETA quiere atacar a los nacionalistas lo hace contra la Ertzaintza o el empresariado.
Los pistoleros, que ya atentaron el martes contra el cuartel de la Guardia Civil de Legutiano, con el asesinato de un agente y heridas a otros tres ocupantes del edificio, que ha quedado inservible, quieren hacer notar su siniestra presencia a pocas horas de la entrevista que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, va a mantener con el jefe del Ejecutivo vasco, Juan José Ibarreche. Además, el lunes 12 también atacaron en Hernani contra dos excavadoras de las obras de la alta velocidad vasca.
Además, al tratarse de una zona en la que viven familias con importantes intereses en la economía de la zona, supone un aviso para que se sometan al chantaje conocido como «impuesto revolucionario».
60 kilos de explosivo
El artefacto que estalló esta pasada madrugada en la localidad vizcaína de Getxo, estaba compuesto por 60 kilos de explosivo, todavía por determinar, y era similar al desactivado el pasado mes de enero en un camino vecinal de Berango, según informaron fuentes del Departamento vasco de Interior.
Los mismos medios afirmaron que la furgoneta Citron Berlingo en la que se encontraba colocado el explosivo estaba direccionada hacia el edificio del Club Marítimo del Abra con el objetivo de «causar los mayores daños posibles». La deflagración ha causado un cráter de dos metros de diámetro por 30 centímetros de profundidad. La Ertzaintza prosigue sus investigaciones así como la recogida de indicios en el lugar. A las doce del mediodía está prevista la presencia del consejero vasco de Interior, Javier Balza, en la zona.
