La juez considera que los hechos pueden suponer un delito de atentado El PP denunció los incidentes en junio de 2003.
ÓSCAR B. DE OTÁLORA
28-11-2006-El Correo
El Juzgado de Instrucción número 2 de Amurrio ha solicitado a la Audiencia de Álava que abra el juicio contra 23 personas acusadas de protagonizar incidentes y ataques contra cargos del PP en la constitución del Ayuntamiento de Llodio, en junio de 2003. La juez estima que algunos de los hechos denunciados son constitutivos de un delito de atentado.
Los incidentes se registraron el 14 de junio de 2003. Ese día se constituían en el País Vasco los primeros ayuntamientos en los que la izquierda abertzale no iba a estar presente, ya que Euskal Herritarrok acababa de ser ilegalizada por la aplicación de la Ley de Partidos. Los radicales protagonizaron disturbios en numerosos municipios en protesta por haber quedado excluidos de los comicios lo que, en algunos casos, obligó a celebrar la constitución de los Ayuntamientos en las Diputaciones.
En el caso de Llodio, la Alcaldía había estado dirigida hasta ese momento por el miembro de EH Pablo Gorostiaga, quien debía entregar la vara de mando al peneuvista Jon Karla Menoyo. Para cuando se abrió la sala de plenos, ésta se encontraba ya abarrotada de simpatizantes de Batasuna. En ese momento los concejales populares fueron rodeados por radicales y, a pesar de estar protegidos por sus guardaespaldas y por agentes de la Policía local, recibieron varios golpes.
A la vista de los hechos, el alcalde entrante optó por constituir el Pleno a puerta cerrada. Posteriormente, los concejales del PP Carlos Urquijo y Santiago Abascal decidieron abandonar el Consistorio por la puerta principal y se negaron a salir por un portón trasero. Fue entonces cuando los violentos volvieron a golpearles, insultarles, lanzarles salivazos y amenazarles. Tres ediles y un militante del PP que habían acudido a apoyar a Abascal y a Urquijo resultaron heridos de diversa consideración.
El PP presentó una denuncia ese mismo día, pero unos meses después el juzgado de Amurrio decidió archivar la querella. La formación conservadora recurrió ante la Audiencia Provincial de Álava. Este tribunal recordó al juzgado local que no podía sobreseer el caso sin haberlo instruido previamente y, además, le comunicó que existían indicios de delito, por lo que debía volver a abrir el sumario. En julio de 2005, la juez de Amurrio comenzó a llamar a declarar a todos los implicados en cumplimiento de la decisión de la Audiencia Provincial. La instrucción ha concluido ahora, en noviembre de 2006.
En su auto, la magistrada identifica a 23 personas como presuntas autoras de la interrupción del pleno con gritos y silbidos. De ellos, 15 están acusados de «haber acometido contra los cargos del PP con empujones, patadas y golpes». Entre los imputados se encuentra uno de los concejales salientes de EH, Jon Ander Altube. También han sido procesados dos ex presos de ETA.
Prisión
Según la instructora, a 15 de los 23 imputados se les puede atribuir un delito de atentado en concurso con dos delitos de lesiones y dos faltas de lesiones. A estas personas, además, se les acusa de un delito de desórdenes públicos. Esta última acusación también se vierte contra otras ocho personas no implicadas en las supuestas agresiones. El delito de atentado está castigado con penas de uno a tres años de prisión, mientras que el de desórdenes públicos implica una pena que oscila entre los tres y los seis meses.
Tanto el alcalde saliente, Pablo Gorostiaga, como el entrante, Jon Karla Menoyo, habían sido imputados por la titular del juzgado, aunque finalmente su caso ha sido sobreseído.
El edil y parlamentario del Partido Popular Santiago Abascal, impulsor de la causa, mostró ayer su satisfacción por la decisión judicial. «Al fin se empieza a hacer justicia, después de todo el tiempo que ha transcurrido desde que sucedieron los hechos», subrayó.