El presidente de la Generalidad acusa al PSOE y al PP de “soberbia” por no haber invitado a CiU a las negociaciones para la reforma constitucional.

Redacción

Martes, 27 de septiembre de 2011 | El presidente de la Generalidad, Artur Mas, ha asegurado que “la relación entre Cataluña y [el resto] de España se convertirá en una relación solo de intereses”. “Siempre habrá muchos intereses comunes, pero será una relación de intereses, que tal vez ya esté bien, pero no será una relación de confianza y mucho menos de estimación“, ha augurado este lunes durante una conferencia en Esade.

Según Mas, Cataluña “ha estado haciendo los deberes durante 30 años, ayudando al conjunto del Estado a salir de las situaciones más complicadas”, pero “en el momento que replantea su autogobierno y su simbolismo identitario, simplemente, lo que se hace es pisotear sus aspiraciones“. El líder de CiU ha considerado que “esto tiene consecuencias que pasan por una evolución de la opinión dentro de Cataluña, no tanto de fatalismo como de tener un proyecto propio”.

PP y PSOE se cree que “los demás solo estamos para obedecer”

El presidente autonómico también ha criticado que no si invitase a CiU a la negociación de la reciente reforma constitucional:

“Cómo puede ser que aquel que está en la oposición es el único que, estando allí para salvar el proyecto general que los otros dicen defender más que nadie, y cuando se reforma la Constitución Española, que nosotros defendimos en el año 78 y durante muchos años más, ni nos llaman para consultarnos cuál es nuestra opinión. Entonces llegas a una conclusión, que tal vez es equivocada: esto solo lo hacen aquellos que se han acostumbrado a mandar, que solo mandan ellos, y que tienen la soberbia de los que creen que solo mandan ellos y los demás solo estamos para obedecer. Y esto en la vida es muy jodido, porque te cansas“.

Mas ha insistido en que “en 30 años no ha habido ni un solo tema de interés general en el Estado en el que el catalanismo no haya estado ayudando“. Y ha recordado que, según él, CiU salvó a España del “caos total” en mayo de 2010 apoyando las medidas económicas propuestas por el Gobierno.