El Partido Comunista de las Tierras Vascas se ausenta para no condenar el atentado de ETA.
Iker Moneo
20-01-2007-La Razón
Vitoria- La fractura existente entre el PP y el resto de grupos del Parlamento vasco, que apuestan por hacer frente al terrorismo mediante el diálogo, quedó patente en el debate que celebró la Cámara de Vitoria para condenar el atentado de Barajas. Una condena de la que no participó el Partido Comunista de las Tierras Vascas, que se ausentó del hemiciclo.
La Diputación Permanente del Legislativo vasco se reunió para discutir un texto del PP en el que mostraba su repulsa ante el atentado de la T-4, se solidarizaba con las familias de las dos víctimas mortales y exigía a ETA su «inmediata e incondicional disolución». Pese a no implicar otra connotación que no fuese repudiar la acción de la organización terrorista, esta iniciativa no salió adelante. El tripartito, el PSE y Aralar, que acudieron al debate con sus propias propuestas, pactaron y aprobaron un texto alternativo que se diferenciaba del presentado por los populares en dos cuestiones muy significativas. Por un lado, no pedía a ETA que desaparezca, sino «el cese definitivo de la violencia». Y por otro, incorporaba un «llamamiento a la unidad de los partidos para, a través de diálogo democrático, hacer frente al terrorismo y defender los derechos y libertades». Esta alusión al diálogo impidió la firma del PP, cuyo portavoz, Leopoldo Barreda, la interpretó como una apuesta «por la negociación política con los terroristas tras dos asesinatos».
Pocas posibilidades había también de que el PCTV hubiese suscrito el texto acordado, ya que había registrado una iniciativa en la que lejos de condenar el atentado de Barajas, proponía que el Parlamento vasco apostase por «utilizar exclusivamente vías pacíficas y democráticas, respetando a todos los agentes que participan en el diálogo y sin ningún tipo de violencia».
«Subordinación a la banda»
La formación heredera de Batasuna aseguró que no participó en el debate «para no entrar en el juego y la bronca del PP». Sin embargo, para los populares, el hecho de que no quisiera participar en un debate sobre la condena del atentado es el «elemento probatorio definitivo de su subordinación a ETA». Aferrado a este argumento y a la intervención del portavoz de Eusko Alkartasuna, Unai Ziarrtea, que afirmó que no está dispuesto «a echar al mundo de Batasuna del último reducto institucional», Barreda instó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a que inicie los trámites para ilegalizar al PCTV.
El debate estuvo precedido por cierta polémica. Un día antes, el PSE anunció que presentaba una propuesta alternativa a la del PP para buscar el mayor consenso posible, también con el PCTV y para evitar debates «artificiales» sobre su ilegalización.
Ayer, el portavoz socialista, José Antonio Pastor, explicó que el desmarque de su grupo respondía a que el texto de los populares era «impecable pero incompleto» porque no hacía un llamamiento a la unidad. Además, lamentó que no se lograse aprobar una condena unánime y aseguró que el hecho de incluir la condena en el texto pactado con los nacionalistas «justificaba el esfuerzo» de lograr la unión de las formaciones democráticas.