‘Es la propia Generalidad la que, todos los días, utiliza este término para referirse a sí misma en los documentos oficiales, muchos de ellos firmados por el propio vicepresidente autonómico, Carod-Rovira, de nombre Josep-Lluís, aquí y en la China Popular’.

Alejandro Tercero

Martes, 2 de noviembre de 2010 | Muchas y variadas son las críticas que habitualmente recibimos por la selección y el enfoque de las noticias que publicamos en LA VOZ DE BARCELONA, algo normal si tenemos en cuenta que la fiscalización de los excesos del nacionalismo es una de las cuestiones que priorizamos en este diario, y eso es algo que, en Cataluña, no sale gratis.

Sin embargo, uno de los reproches más sorprendentes es el de las traducciones de algunos de los términos que utilizamos.

A nadie le extraña que la televisión pública de Cataluña hable de Reial Madrid, Cadis o Andalusia; que la administración autonómica utilice el término Castella i Lleó; o que el Ayuntamiento de Barcelona rebautice una estación de metro como Artigues-Sant Adrià, a pesar de que el barrio que le da nombre se denomina así en honor al promotor que lo urbanizó a principios del siglo XX, Francesc Artigas i Solà.

En cambio, se le presuponen oscuras razones políticas a quien utiliza los vocablos Gerona, Lérida o Tarrasa, cuando habla o escribe en castellano, aunque todos ellos sean topónimos aceptados por la Real Academia Española.

El caso más chocante es el de la terminología de las instituciones autonómicas de Cataluña. Se considera poco menos que anticatalán o catalanófobo a quien denomina al Gobierno autonómico de Cataluña como Generalidad en vez de Generalitat, al utilizar la lengua española. Pero más de uno se llevaría una sorpresa solo con consultar el Diario Oficial de la Generalidad de Cataluña (DOGC) en su versión en castellano.

Y es que, es la propia Generalidad la que, todos los días, utiliza este término para referirse a sí misma en los documentos oficiales, muchos de ellos firmados por el propio vicepresidente autonómico, Carod-Rovira, de nombre Josep-Lluís, aquí y en la China Popular. Algo que está avalado, incluso, por el Departamento de Política Lingüistica de la Generalidad, tal y como recoge el documento Criterios de traducción de nombres, denominaciones y topónimos.

Así, también es probable que a algunos críticos de estas traducciones les parezca insólito el sintagma utilizado por la Generalidad para referirse a su propio cuerpo de policía autonómica en la versión en español del DOGC, y es que la traducción oficial que se utiliza es la de ‘mozos de escuadra’.

Alejandro Tercero es director de LA VOZ DE BARCELONA