Enviados del Gobierno y de ETA preparan en Oslo la negociación
22/12/2025

Las delegaciones que representan al Gobierno y a la organización criminal podrían estar encabezadas por el presidente del PSE, Jesús Eguiguren, y el máximo cabecilla de ETA, Josu Ternera.
07-10-2006-ABC
El Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero y ETA han establecido ya contactos secretos en Oslo, con el conocimiento del Gobierno noruego, para iniciar las negociaciones que desemboquen en la erradicación definitiva del terrorismo a cambio de una salida gradual a la situación de los presos y huidos de la banda criminal.
Fuentes conocedoras del proceso consultadas por ABC señalan, dentro de la máxima cautela, dado que las conversaciones están clasificadas con el sello de «máximo secreto», que las delegaciones que representan al Gobierno y a la organización criminal podrían estar encabezadas por el presidente del PSE, Jesús Eguiguren, y el máximo cabecilla de ETA, José Antonio Urrutikoetxea Bengoetxea, «Josu Ternera». Expertos antiterroristas, por su parte, ponen en duda que Eguiguren participe en la «negociación técnica», destinada, entre otros objetivos, a certificar el desarme de la banda, y lo ven más en el foro tripartito. Otra cosa, precisan, es que haya participado en los preparativos de los encuentros formales entre el Gobierno y ETA.
Fuentes del Ministerio de Exteriores noruego consultadas por ABC se limitaron a señalar que ni confirmaban ni desmentían la información.
Para la concreción de este primer encuentro formal ambas partes habrían contado con la mediación del Centro de Diálogo Henri Dunant, que tiene su sede en Suiza. Este organismo no gubernamental ya intervino en los preparativos para las reuniones preliminares que emisarios de La Moncloa y de la organización criminal celebraron en los últimos meses de 2005 en Ginebra y Oslo, y que abrieron paso al alto el fuego permanente anunciado por la banda el pasado 22 de marzo.
El «Arafat» de ETA
La escenificación de unas conversaciones formales en Oslo, con intermediación a amparo internacional incluido, satisface plenamente una tradicional aspiración de la banda terrorista. A los etarras les gusta reflejarse en la experiencia de otros «conflictos» con proyección internacional que se resolvieron en Noruega. De hecho, cuando Oslo fue escenario de las negociaciones encaminadas a lograr la paz entre palestinos e israelíes, desde Herri Batasuna se lanzó la consigna/propaganda de que ETAya tenía su «Yaser Arafat», en alusión al entonces interlocutor Eugenio Etxebeste, «Antxon», y que al Gobierno le faltaba proponer su «Isaac Rabin», entonces primer ministro de Israel. El fracaso en que se convirtió la «vía Oslo» para israelíes y palestinos empujó a ETA-Batasuna a reivindicar el modelo irlandés.
El plan inicial de Zapatero era que la «mesa técnica» que deben compartir el Gobierno y ETA para negociar «paz por presos» comenzara sus trabajos el pasado mes de agosto. La banda terrorista, sin embargo, ha ido demorando la cita con los emisarios de La Moncloa, ya que su pretensión de partida era que estas conversaciones coincidan con la mesa de partidos, cuya constitución este pasado verano aún estaba verde. La banda nunca se comprometería ante el Ejecutivo a abandonar definitivamente el terrorismo, aunque se le ofrezca un plan para solucionar la situación de presos y huidos, si no comprueba que en «tiempo real» los partidos firman en la otra mesa la autodeterminación para el País Vasco y Navarra.
El hecho de que ETA haya acudido ya a la cita con el Gobierno en Oslo para afrontar la negociación «armas por presos» podría ser reflejo de que considera que está madurando la constitución de su anhelada mesa de partidos. Significaría también, según interpretan los expertos antiterroristas, que «Josu Ternera» se ha impuesto a las tesis de Garikoitz Aspiazu, «Txeroki», o, al menos, ha ganado tiempo para continuar con la estrategia negociadora, frente a los sectores partidarios de lanzar ultimátum con vistas a que el Gobierno haga concesiones antes de sentarse en una mesda.
Según distintas fuentes consultadas, el Ejecutivo y la banda tendrían dos o tres representantes en la «mesa técnica», un esquema parecido al previsto para el foro tripartito, aunque podrán disponer de un equipo de asesores, como ya ocurrió en las conversaciones de Argel, con Felipe González en La Moncloa, y en las de Suiza, con Aznar al frente del Gobierno.
Los asesores de «Ternera»
En este sentido, «Josu Ternera» ha ido constituyendo a lo largo de los últimos meses un equipo de interlocución formado por antiguos dirigentes de Batasuna. Entre ellos se encuentran su propio hijo, Egoitz Urrutikoetxea, así como Ainhoa Ozaeta Mendicute, que fue coordinadora en Guipúzcoa en la anterior mesa nacional, y el ex parlamentario en la Cámara de Vitoria Jon Salaberria. Los tres se encuentran en la clandestinidad, aunque ninguno de ellos tiene causas de gravedad con la Justicia española, lo que en cierta forma les «blinda» para moverse con cierta libertad en tiempos de negociación con los emisarios del Gobierno.




