Xurde Rocamundi, empresario catalán, ha contado su caso a La Mañana de la COPE. Ha sido sancionado por tener los carteles de su negocio y los contratos escritos en castellano. Alega que la multa va contra su libertad de expresión, ideológica y de empresa.
El empresario muestra los rótulos de su agencia inmobiliaria
U.C. – 28-01-10.
El próximo sábado hay convocada una manifestación a las 12 horas en la Plaza de la Iglesia de Arenys de Mar con el lema: ”POR UNA CATALUÑA EN LIBERTAD. NO A LAS MULTAS LINGÜÍSTICAS”.
El empresario catalán Xurde Rocamundi ha pasado esta mañana por los micrófonos de la Cadena COPE. Ha contado a Nacho Villa cómo, sobre el 2008, le llegaba una carta de la Agencia Catalana de Consumo en la que se le decía que le había denunciado alguien a través de Internet «por el hecho de tener tanto el nombre de mi empresa como los carteles exteriores en castellano» y que incumplía la normativa, que dice que ‘al menos’ hay que ponerlos en catalán. «Me invitaban a cambiarlos», ha explicado Rocamundi, que tiene una inmobiliaria y que considera que «estoy en una comunidad autónoma, mi lengua materna es el castellano, la mayoría de mis clientes lo son y seguí con mis carteles». El empresario explica que el pasado año, una inspectora de la Agencia Catalana de Consumo se presentó en su inmobiliaria, hizo fotos del exterior y, tras pedirle toda la publicidad y los contratos, le puso una sanción económica por vulnerar los derechos lingüísticos de los consumidores. «Sobre julio del 2009 me llegó la sanción que ponía que la cuantía eran 1.200 euros», dice Rocamundi, «y lo que hice fue, en vez de callar y pagar como la mayoría, hice las alegaciones correspondientes, me puse en contacto con las asociaciones cívicas (Impulso Ciudadano y Asociación por la tolerancia) para que me dieran apoyo jurídico y hemos hecho las alegaciones y, posteriormente, el recurso de alzada».
Rocamundi ha presentado un recurso contra la sanción por tener el rótulo y los carteles informativos del escaparate de su negocio y los contratos de su empresa en español. Alega que la multa va contra su libertad de expresión, ideológica y de empresa. El Parlament de Cataluña ya ha dado luz verde al trámite del nuevo Código de Consumo, que endurece las sanciones por esta cuestión y las eleva hasta los 10 mil €.
Xurde Rocamundi ha dicho que «hay una Administración que se ha puesto como objetivo una sociedad monolingüe», lo cual es «totalmente discriminatorio». Para Rocamundi, «viven extasiados en sus sueños soberanistas» y, lo peor es que «hay mucha ignorancia; mucha gente se cree que estas multas no existen y que se está exagerando».
