NIEVES COLLI | MADRID

Primero fueron las Juntas Generales de Guipúzcoa, el Parlamento vasco y la Academia de la Ertzaintza, con sede en Álava. Ahora, las Juntas Generales de Vizcaya. Tanto en su fachada como en su interior deberá ondear, de forma permanente y en lugar preferente, la bandera de España. Así lo ha ordenado el Tribunal Supremo después de rechazar un recurso de la institución provincial y confirmar la sentencia dictada en el año 2005 por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV). Además, las Juntas vizcaínas deberán pagar 3.000 euros en concepto de costas.

Los argumentos son los mismos que Supremo ha repetido ya en varias ocasiones y tienen su base en la Ley de Banderas, ignorada por las instituciones autonómicas vascas desde hace veinte años. La llamada «guerra de las banderas» llegó a los tribunales en 2002, cuando el entonces delegado del Gobierno en el País Vasco, Enrique Villar, del PP, denunció ante el TSJPV la ausencia de la enseña nacional en la sede la academia de la Ertzaintza.

Por «imperativo categórico»

La ley de banderas, que obliga a todas las administraciones públicas, señala en su artículo 1 que la «bandera de España simboliza la nación, es signo de soberanía, independencia, unidad e integridad de la patria y representa los valores superiores expresados en la Constitución». El artículo 3.1 especifica que «la bandera de España deberá ondear en el exterior y ocupar el lugar preferente en el interior de todos los edificios y establecimientos de la Administración central, institucional, autonómica, provincial o insular y municipal del Estado».

La redacción de ambos preceptos no da lugar para la duda. Y así lo explica el Supremo en su sentencia: «La expresión «deberá ondear» que utiliza el legislador, formulada en imperativo categórico, viene a poner de relieve la exigencia legal de que la bandera de España ondee todos los días y en los lugares que expresa, como símbolo de que los edificios o establecimientos de las Administraciones Públicas del Estado son lugares donde se ejerce directa, o delegadamente, la soberanía y en ellos se desarrolla la función pública en toda su amplitud e integridad (…) de acuerdo con los valores, principios, derechos y deberes constitucionales que la propia bandera representa, junto con la independencia, soberanía e integridad del Estado español». «Por ello -recalca el alto Tribunal-, la utilización de la bandera de España en dichos edificios debe de serlo diariamente como manifestación, frente a los ciudadanos, del contenido que simboliza y representa».

El incumplimiento durante años de esta norma por las instituciones vascas no supone, como alegaron las Juntas de Vizcayas en su recurso, su derogación por la vía de los hechos. «En modo alguno» puede considerarse consolidada la actuación de una administración pública cuando se sitúa «al margen de la legalidad vigente».

Aceptar ese planteamiento supondría, según el Supremo, «una ruptura del principio de legalidad» establecido por la Constitución. Y también supondría asumir «que las normas con rango de ley se derogan –o no resultan exigibles– por el simple transcurso del tiempo acompañado de su incumplimiento; evidente es, y así lo señala el Código Civil, que la no aplicación de una norma no lleva a su desuso ya que, en modo alguno, la costumbre puede prevalecer sobre la ley».

El Supremo también rechaza que el requerimiento que el Abogado del Estado formuló a las Juntas de Vizcaya (antes de acudir a la Justicia) fuera extemporáneo por haberse presentado fuera del plazo de dos meses señalado por la ley. En este caso, sostiene la Sala, el «plazo permanece abierto» porque la situación de ilegalidad ha sido continuada.

El TSJPV sortea 30 plazas para asistir al juicio a Ibarretxe

Ante la expectación que ha suscitado el juicio contra el lendakari Juan José Ibarretxe y el secretario general del PSE, Patxi López, acusados ambos de un delito de desobediencia por las reuniones que mantuvieron con dirigentes de la ilegalizada Batasuna, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha decidido sortear treinta plazas entre el público que quiera asistir a las sesiones. El juicio comenzará el próximo 8 de enero, en plena precampaña electoral en el País Vasco, con los dos grandes rivales en el banquillo de los acusados, y está previsto que dure tres semanas. Los interesados en el sorteo, que se celebrará el día 23, deberán llamar antes del 22 de diciembre al 944016528. Junto a Ibarretxe y López se sentarán en el banquillo el socialista Rodolfo Ares así como Arnaldo Otegi y otros cuatro batasunos.