El PNV advierte a Rajoy de que la paz en el País Vasco ‘no es irreversible’

El Mundo

El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, ha advertido al futuro presidente del Gobierno Mariano Rajoy que la paz en el País Vasco «no es irreversible» y le ha advertido de que «hay que seguir trabajándola». Por ello, le ha pedido «no desaprovechar esta oportunidad histórica» creada tras el anuncio de ETA de cese definitivo de la violencia y ha propuesto «abordar un ambicioso proceso de diálogo, encuentro y acuerdo».

En esta línea, Erkoreka ha pedido a Rajoy que aplique una política penitenciaria «más abierta y más flexible». Sobre este aspecto, le ha recordado que en el pasado, durante el Gobierno de José María Aznar, el PP ya hizo gestos en este sentido.

La segunda sesión del debate de investidura de Mariano Rajoy ha comenzado con el turno del PNV. Erkoreka ha insistido en que el nuevo presidente «va a poder gobernar con manos libres, sin necesidad de trabar alianzas con terceros». Por ello, le ha pedido que haga un esfuerzo de entendimiento con el resto de fuerzas políticas de la Cámara para legitimar sus iniciativas.

Erkoreka ha pedido a Mariano Rajoy que ponga su mayoría absoluta «al servicio de la sociedad». «Aquí se hará lo que usted quiera y no se hará nada que no quiera», ha afirmado el dirigente nacionalista vasco, dejando claro que la responsabilidad política recae ahora de forma total en el líder del PP.

Para construir esa paz irreversible, el PNV considera imprescindible asegurar la veracidad de la renuncia de ETA a la violencia, por lo que es necesario que desaparezcan «absolutamente todas» las expresiones de amenaza e intimidación que todavía subsisten en el País Vasco.

Además, ha abogado por dar una prioridad absoluta al reconocimiento, protección y amparo de las víctimas y porque haya una asunción colectiva o individual por parte de quienes han provocado tan «ingente daño humano».

Sin este paso, «no va ser posible asentar sobre bases sanas la reconstrucción de la vida en común», en opinión de Erkoreka. Pero también será necesario, según ha recalcado, adoptar otro tipo de medidas que requieren «riesgos, compromisos, generosidad y sentido de Estado» y «mucha discreción y tiento».

Se ha referido así a la política penitenciaria que el nuevo Gobierno tendrá que aplicar después del comunicado de ETA y después de que la mayoría de los partidos vascos haya apostado por un acercamiento de los presos de la banda al País Vasco.

«Ha llegado el momento de poner freno a la excepcionalidad y de implementar una política penitenciaria más abierta, dinámica y flexible, que sin merma de la legalidad, contribuya a normalizar la situación de los reclusos y a avanzar en la consolidación de la paz», ha asegurado.

Ha insistido en que este asunto de los presos hay que sacarlo de las estridencias del debate público y mediático y manejarlo con «máxima prudencia». «No buscamos el ruido, sino soluciones», ha apostillado. El portavoz nacionalista ha dejado claro que su partido no busca la «espectacularidad del humo» porque lo importante es el «asado».