De la Vega dice que no es un trasvase.
18-4-2008 – LA RAZÓN
Servimedia/Efe – Madrid
El Consejo de Ministros ha dado hoy luz verde a la puesta en marcha de la «conducción» que llevará agua del Ebro a Barcelona, sistema que, según dijo la vicepresidenta primera, «se volverá a hacer para cualquier otro ciudadano» que lo necesite, «viva donde viva» y que costará 180 millones de euros.
Así lo anunció hoy la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, en la rueda de prensa posterior a la primera reunión ordinaria de Consejo de Ministros de esta legislatura.
Durante su intervención, De la Vega reiteró que «no se trata de un trasvase, sino de una conducción», así como que no afectará al caudal del Ebro, que «queda exactamente igual que ahora».
Además, reiteró que este «mismo sistema» ya se usó para llevar agua a Benidorm en el periodo 1999-2001, y a 1,5 millones de valencianos entre 2006-2007, «curiosamente, sin controversias políticas».
De la Vega dijo que sería «imperdonable e irresponsable» no llevar agua a Barcelona.
De la Vega subrayó la importancia de evitar «prejuicios y falsedades que crispan y enfrentan a unos españoles con otros», e incidió en que las medidas aprobadas hoy responden a una situación de emergencia por la cual los ciudadanos de Barcelona, dijo, se encontrarían en octubre sin agua para beber.
Cifró en cinco millones las personas que tendrían dificultades de suministro si persisten los problemas derivados de la sequía, y dijo que «un Gobierno responsable» debe atender esa situación de emergencia y actuar «con decisión».
La vicepresidenta explicó que los gobiernos central y catalán han estudiado diferentes alternativas para garantizar el suministro a Barcelona, y se mostró convencida de que la elegida es «la mejor opción» y la más sostenible, ya que no se va a detraer «ni una sola gota más del Ebro».