La misma universidad californiana invitó el pasado mes de febrero a Juan José Ibarreche para impartir otra conferencia, donde éste reclamó también el autogobierno.
4-4-2008 – LA VANGUARDIA
Barcelona. (EFE).- El conseller de Cultura de la Generalitat, Joan Manuel Tresserras, ha defendido hoy, durante una conferencia en la universidad norteamericana de Stanford, «el derecho democrático (de Catalunya) a decidir sobre sus asuntos, cuando la mayoría de la gente así lo manifieste».
El conseller catalán, que no es militante de ERC aunque apoya al sector de este partido liderado por Josep Lluís Carod-Rovira, ha aprovechado su visita institucional a California para subrayar que «Catalunya aspira a tener la máxima capacidad para autogobernarse como sujeto político en un marco de cohesión social».
«Somos un pueblo que defiende sus libertades históricas, pero sobre todo lucha por disponer de nuevas libertades que le permitan participar con voz propia en una Europa concebida federalmente», ha asegurado el conseller al auditorio.
Esta universidad californiana también fue el marco elegido por el lehendakari, Juan José Ibarretxe, para exponer sus planes de autogobierno para el País Vasco.
En su conferencia, titulada «Catalunya: políticas culturales y nación global», el conseller del gobierno catalán ha definido a Catalunya como «una nación de Europa» que actualmente es una «comunidad autónoma dentro del Reino de España», según el texto facilitado por el departamento de Cultura de la Generalitat.
«Mientras en Europa la mayoría de estados nación parecen estar seguros y satisfechos de los que son y de cómo son, la Catalunya sin Estado, abierta, dinámica y frágil está más bien dispuesta a repensarse y a reinventarse. A convertirse en un país nuevo, construido entre todo el mundo, viejos y nuevos catalanes», ha proclamado.
Ha criticado la Catalunya que sólo apuesta por un «nacionalismo esencialista» y la que dice que el Estado español es un Estado uniforme y sin hechos diferenciales» por ser «caras de la misma moneda del fundamentalismo».
«El proceso de construcción nacional que nosotros defendemos es abierto, incluyente, que quiere contar con todas las aportaciones, y basado en la voluntad colectiva de ser un sujeto con capacidad para decidir por sí mismo», ha apuntado.
«No les hablo de un proyecto contra nadie», ha remarcado el conseller, que ha defendido aquellos «proyectos democráticos de futuro dispuestos a reconocer a Catalunya su capacidad de autogobierno».
En su discurso, el conseller también ha remarcado que en Catalunya «la lengua no es un factor de confrontación, sino un factor de integración y cohesión social», y ha recordado la presencia de Catalunya en la Feria del libro de Fráncfort.
«Apostamos por la modernización constante de nuestra cultura, renovándola y actualizándola. (..) Todo el mundo ha de sentirse invitado a formar parte de la cultura catalana desde el primer día en igualdad de condiciones que los otros. En Catalunya, y en la cultura catalana, no nos sobra nadie», ha espetado.
En este contexto, también ha destacado que «ser catalán es un derecho, nunca una obligación o una exigencia», y ha asegurado que doce millones de personas de diferentes países comparten el uso del catalán, al tiempo que se ha comprometido a continuar ayudando a las empresas del sector cultural catalán a internacionalizarse.
