El único concejal del PP en Elorrio, Carlos García, ha tenido que abandonar el Ayuntamiento escoltado.

Redacción

Sábado, 11 de junio de 2011 | La entrada de Bildu en más de un centenar de gobiernos municipales del País Vasco y Navarra constituidos este sábado ya ha podido dejar ver algunas escenas significativas de lo que será esta legislatura.

En Lizarza (Guipúzcoa), donde la formación radical se ha hecho con los 7 concejales del Consistorio, la primera medida que ha adoptado el Ayuntamiento ha sido la de retirar la bandera de España de su fachada y dejar únicamente la del País Vasco, contraviniendo impunemente la ley, junto a una pancarta que reclama el retorno de ‘los presos y refugiados vascos’ a esa comunidad. Además, se ha vetado el acceso a los medios durante el primer pleno municipal.

En Elorrio (Vicaya), el voto del único concejal del PP, Carlos García, ha desequilibrado el empate que había entre Bildu y el PNV a favor de estos últimos, lo que no ha gustado al centenar de proetarras que habían asistido al pleno de constitución del Ayuntamiento. Además de insultos como “fascista” o “hijo de puta”, García ha tenido soportar los atronadores abucheos de los presentes cuando, durante su discurso, ha recordado a algunas víctimas de ETA como Miguel Ángel Blanco (PP), Isaías Carrasco (PSE) o el empresario Inaxio Uria. Al finalizar, ha tenido que abandonar el Consistorio escoltado.