La kakistocracia del Gobierno Pedro Sánchez del 2025

Se me acaban ya los calificativos, supongo que al igual que a ustedes, del Gobierno que sufrimos. Para finalizar el año les propongo el que intitula el presente artículo, esto es, la kakistocracia del Gobierno Sánchez.

Con este palabro, recién descubierto por mí, se hace alusión a un sistema donde los menos capacitados o más inescrupulosos se aferran al poder, para desgracia de su propio pueblo, parasitándolo como si no hubiera un mañana.

Estas reflexiones, las hacía en el tradicional repaso que efectúo de la producción legislativa del año que expira. Así, el año pasado por estas fechas tuve el placer de publicar en Denaes unas líneas sobre el 2024, el año de menor producción legislativa de la historia. El lamentable bagaje era de únicamente 13 leyes: 7 orgánicas, ordinarias. El peor sin elecciones desde 1979.

Pues bien; Sánchez ha igualado su penoso record en 2025 sacando solo adelante tan sólo otras 13 leyes: 10 ordinarias y 3 orgánicas. Paso a analizarles esta paupérrima labor legislativa.

En lo que a Leyes Ordinarias se refiere, se aprobaron:

• Ley 1/2025, de 1 de abril, de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentaria, fruto de  compromisos con la Unión Europea.
• Ley 2/2025, de 29 de abril, por la que se modifican el Estatuto de los Trabajadores y la Ley General de la Seguridad Social, en materia de incapacidad permanente, consecuencia obligada de la Sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, de 18 de enero de 2024 (asunto C-631/22)
• Ley 3/2025, de 29 de abril, por la que se modifica la Ley 12/2002, por la que se aprueba el Concierto Económico con la Comunidad Autónoma del País Vasco, imposición de los compromisos de Sánchez con quienes le sostienen en el poder.
• Ley 4/2025, de 24 de julio, por la que se modifica la Ley 28/1990, por la que se aprueba el Convenio Económico entre el Estado y la Comunidad Foral de Navarra, en idéntico sentido que la anterior.
• Ley 5/2025, de 24 de julio, por la que se modifican el texto refundido de la Ley sobre responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor, por imperativo de Directivas de la Unión Europea
• Ley 6/2025, de 28 de julio, de modificación del Régimen Económico y Fiscal de Canarias, para la regulación de las inversiones en elementos patrimoniales afectos a la actividad de arrendamiento de vivienda en las Islas Canarias, de escaso impacto económico.
• Ley 7/2025, de 28 de julio, por la que se crea la Agencia Estatal de Salud Pública, es decir, un chiringuito que en nada redundará en beneficio del ciudadano.
• Ley 8/2025, de 29 de septiembre, por la que se modifican la Ley sobre Navegación Aérea, y la Ley 21/2003, de Seguridad Aérea, consecuencia de compromisos internacionales.
• Ley 9/2025, de 3 de diciembre, de Movilidad Sostenible, norma programática pendiente de múltiples desarrollos para resultar operativa.
• Ley 10/2025, de 26 de diciembre, por la que se regulan los servicios de atención a la clientela, ley que imponía, si recuerdan, la atención en catalán u otras lenguas cooficiales fuera incluso del territorio de su Comunidad Autónoma.

Por lo que respecta a Leyes Orgánicas (cuya diferencia con las leyes ordinarias radica en que se aprueban según la Constitución por mayoría absoluta), se publicaron:

• Ley Orgánica 1/2025, de 2 de enero, de medidas en materia de eficiencia del Servicio Público de Justicia, que está destrozando el modelo juzgados y tribunales, de consecuencias impredecibles, cuando se implante de manera efectiva a lo largo del año 2026.
• Ley Orgánica 2/2025, de 3 de junio, por la que se autoriza la ratificación de cuatro enmiendas al Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, consecuencia de compromisos internacionales.
• Ley Orgánica 3/2025, de 27 de junio, por la que se modifica la Ley reguladora del derecho de asociación, con el único objetivo de ilegalizar la Fundación Franco.

En fin, donde se ha superado, como no puedes ser de otra manera, el kakistocrático Gobierno Sánchez es en la utilización desmesurada de Reales Decretos – Leyes (normas con rango de ley que aprueba el Gobierno sin tramitación parlamentaria por razones de extraordinaria y urgente necesidad, si bien deben ser objeto posterior de ratificación por las cámaras) pasando de 11 en el 2024 a 17 en el presente. Serían resumidamente los siguientes:

• 1/2025, para hacer frente a situaciones de vulnerabilidad.
• 2/2025, de reforma normativa de extranjería.
• 3/2025, de incentivos ligados a la movilidad eléctrica.
• 4/2025, de respuesta a la amenaza arancelaria.
• 5/2025, de ayudas al transporte público por parte de la juventud para los viajes realizados en el periodo estival de 2025.
• 6/2025, de medidas relativas a la financiación territorial.
• 7/2025, de medidas urgentes para el refuerzo del sistema eléctrico.
• 8/2025 por el que se declaran diversas iniciativas y programas como acontecimientos de excepcional interés público.
• 9/2025, por el que se amplía el permiso de nacimiento y cuidado.
• 10/2025, por el que se adoptan medidas urgentes contra el genocidio en Gaza y de apoyo a la población palestina.
• 11/2025, para tratar de cumplir con las obligaciones establecidas en la Ley 3/2024, sobre la ELA y otras enfermedades de curso irreversible.
• 12/2025,  de respuesta a los daños causados por la DANA en 2024.
• 13/2025, de medidas para la recuperación de la isla de La Palma.
• 14/2025, en materia de retribuciones en el ámbito del sector público.
• 15/2025, para entre otras inefables cuestiones, transferir a Cataluña competencias en materia de funcionarios nacionales habilitados, del que tratamos en artículo precedente.
• Y Pendientes de Convalidación estarían el 16/25 que contienen el llamado escudo social, es decir, beneficios básicamente a la oligarquía okupa, y el 17/25 sobre bonificaciones en el transporte público

En definitiva: podemos concluir que, en la España del 2025, como en la de 2024 y 23, no ha habido en marcha ningún proyecto político efectivo representado por el Presidente Sánchez, ni progresista ni de ningún tipo, más allá de seguir atrincherado en la Moncloa, al menos en lo que se refiere a la labor del legislativo, tal como hemos demostrado.

Reiteramos, al igual que en 2024, estamos en el 2025 que ya expira, ante el año sin elecciones con menor producción legislativa de la historia desde el 1979.

Frenar la máquina legislativa de un Estado, por descontado, es muy dramático para cualquier país, toda vez que un Estado de Derecho es, como una edificación, que precisa constantemente de labores de conservación y/o mantenimiento, bien para atender a nuevas necesidades ciudadanas, bien para adaptarnos a los compromisos internacionales o simplemente para armonizar resoluciones judiciales contradictorias que se van produciendo.

La parte positiva, desde luego, es que este Gobierno no alcanza a desarrollar su programa político totalitario y antipatriota que se vislumbra en lo poco que puede legislativamente aprobar.  

Me resta desearles un próspero 2026, a ser posible, con elecciones democráticas que libere a España de la kakistocracia Sanchista.

Hasta entonces: ¡Cuídense amigos!

 

Alberto Serrano Patiño.

Ex Concejal del Ayuntamiento de Madrid

Funcionario de Carrera. Letrado.

Docente de vocación