Estimados amigos:

Sin duda uno de los temas de más actualidad en el debate político de la Nación Española es la crisis económica. Muchos son los expertos que admiten que la economía española se enfrenta a grandes desequilibrios y que probablemente sea la peor situación económica general y la peor situación financiera pública en medio siglo de Historia de nuestra Nación.

Sin embargo, ya son muchos quienes piensan que la actual depresión económica guarda estrecha relación con la crisis política de la Nación Española. Al ya constatado descrédito de la clase política que la ciudadanía manifiesta en las encuestas, se une la impresión de que el actual Estado de las Autonomías es inviable y causa directa de la crisis económica tan aguda que sufre España. Urge por lo tanto, para garantizar la continuidad de nuestro régimen constitucional, la reforma del Estado que permita a España salir de una crisis que cada vez tiene menos que ver con la crisis que se vive en otros países de nuestro entorno y cuya relación se establece con problemas propios de nuestro modelo de Estado. La reforma de la Constitución ha sido desde sus inicios una de las principales preocupaciones de la Fundación DENAES, que presentó en el año 2007 un Proyecto de Reforma Constitucional.

En una hipotética reforma constitucional, muchas de las miradas se dirigen hacia el modelo autonómico, que ha provocado un aumento ciertamente espectacular de funcionarios en ramas que ya se encontraban bien cubiertas, con el consiguiente gasto público. En poco más de treinta años de democracia, el número de funcionarios en España se ha quintuplicado, sin que el aumento de población haya sido tan significativo como para provocarlo. Pero más allá de la mera administración pública, lo más preocupante del sistema autonómico es la enorme divergencia en cuestiones de ámbito nacional como son el uso de la lengua oficial de España y los programas educativos, manifestado en legislaciones tales como el Estatuto de Cataluña.

Se llega al extremo de que en comunidades autónomas como Cataluña los contenidos curriculares apenas mencionan la realidad de la Nación Española, en algunos casos no sólo de forma marginal sino representada como «opresora» o «postiza», en consonancia con la ideología de los partidos separatistas antiespañoles. Por otro lado, en la vida pública se margina o incluso se prohíbe la lengua común de todos los españoles, el español, en sustitución de lenguas regionales como el catalán. Esta situación provoca que cada vez menos cosas nos sean comunes a los españoles, y que, en la práctica, las diecisiete comunidades autónomas actúen como diecisiete partes soberanas al margen de España.

En base a la situación planteada, cabe plantearse la siguiente cuestión:

¿Es posible salir de la crisis economica sin ir a la reforma de la organizacion territorial del Estado?

Ciudades donde se va a celebrar este Observatorio: Gran Canaria, Murcia, Santander, Oviedo, Madrid, La Línea de la Concepción (Cádiz), Majadahonda (Madrid), Collado Villalba (Madrid), Toledo y Sevilla.