Cada vez son más los españoles convencidos de que la nación necesita ser defendida.


Ayer se presentó en Madrid la Fundación para la Defensa de la Nación Española. Este acto, multitudinario, culmina la cadena de asambleas públicas celebradas en diversas capitales de España y abre el campo a nuevas reuniones en otras ciudades. La Fundación está en marcha y avanza a buen paso. En realidad, por una sola razón: porque cada vez son más los españoles convencidos de que la nación necesita ser defendida. Es triste ver que España se ha convertido en algo precario, debilitado, pero es esperanzador comprobar que la sociedad española no se duerme, que reacciona en defensa de lo que es suyo –en defensa de su nación.

En el acto de Madrid hablaron muchas voces de la Fundación, personalidades de relieve público que se han comprometido con un concepto demasiadas veces desdeñado en nuestro país: el de patriotismo. Como explicó Santiago Abascal en su discurso de cierre, la Fundación quiere reivindicar el patriotismo español como virtud cívica, como sentimiento y como pensamiento, capaz de tender puentes entre unos y otros partidos, entre unas y otras ideologías. Queremos una nación de todos y para todos, consciente de sí, empresa común y proyecto de futuro. Esa es nuestra España.